Intentando cumplir con su tarea~(libre) [continuacion]

Llegaron al jardín era muy hermoso y grande, buscaron una pequeña mesa de jardín que tuviera sillas para poder tomar el te, caminaron unos 10 min y Ariel por fin encontró un hermoso lugar para sentarse, relajarse y terminar la tarea, era alado de unos rosales rojos muy hermosos, Ariel le mostro a Umiko el lugar y caminaron hacia el.

Al llegar Ariel tomo una de las sillas y la retiro para que Umiko se sentara, con la silla en manos miro a Umiko y le dijo “su asiento señorita” y le sonrió, una ves que estaban sentados Ariel abrió su maletín, saco 2 tazas de te que siempre traía con el una negra y otra blanca, Ambas tazas tenían gravados de rosas rojas, saco un pequeño pañuelito dentro había unos dulces que había comprado antes, y un termino lleno de agua caliente. Ariel procedió a preparar los tés, dio vuelta y tomo 2 rosas muy hermosas una la desojo y los pétalos mas hermosos los puso dentro de las tazas de te y la otra rosa la coloco cuidadosamente en el cabello de Umiko y le dijo “espero que esto alegre tu día” y le sonrió.

Una ves preparados los tés, Ariel le dio la taza blanca a Umiko diciéndole “espero que te guste, es mi te favorito, rosa con miel y especias” sonriendo comenzó a tomar su te,

Entraron al hermoso jardín que tanto le gustaba a Umiko, siempre que estaba ahí era inevitable pintarse una agraciada sonrisa.
Caminaron en silencio aproximadamente unos 10 minutos, en eso la peli azul se deleitaba con la hermosa vista que ofrecía el basto jardín. Llegaron hasta una mesita a un lado de unos hermosos rosales rojos.
El chico se aproximó a una de las sillas y la movió un poco.
“su asiento señorita”
Dijo el joven y enseguida sonrió. Umiko se sorprendió levemente por su acción pero luego lo reprimió inconscientemente y se sentó tranquilamente, sin dejar atrás su sonrisa. Observó como su compañero sacaba de su maletín un par de tazas y preparó tranquilamente un té con una de las dos rosas que había cortado. Miró como Ariel se acercó un poco a ella para colocarle la otra rosa en su cabello, eso hizo que se sonrojara levemente.
“espero que esto alegre tu día”
Umiko no pudo evitar asentir levemente mientras agachaba la mirada, pero después la levantó al ver que el chico le ofrecía de su té favorito. La chica tomó la taza y empezó a reír discretamente.
-Que peculiaridad –expresó mientras observaba la taza- digo, no todos los días te encuentras a una persona que carga consigo lo necesario para su té- se sonroja nuevamente mientras acerca la taza a sus labios, disfrutando de su dulce olor.
-Gracias –dijo antes de tomar un poco de la bebida.

Umiko le hiso un comentario sobre su kit para hacer te, Ariel sonrió y le contesto “Soy aficionado al te, creo que eso explicaría por que siempre cargo conmigo un set para prepararlo” Ariel se rio levemente y tomo asiento alado de Umiko.

Era una mañana hermosa, el cielo era claro y despejado, las aves volaban por el cielo, era como si nada hubiera pasado, Ariel recordó los sucesos de anoche y mientras tomaba te a lado de Umiko le comento “parece como si nada hubiera pasado” y tomo un sorbo de te, y con un tomo mas serio, le dice a Umiko “ Todo parecía realmente una película de terror, hasta uno podría decir que fue actuado”.

Ariel bajo la taza de te y miro el cielo “ Anoche no pude dejar de sentir rabia, el ver lo que pasaba y no poder hacer nada, hice un juramente de proteger a todas las personas que lo necesitaran” Ariel apretó su puño “y no fui capas de proteger a mis compañeros” Ariel volteo a ver a Umiko y con determinación le dijo “pero no dejare que es vuelva a pasar, prometo volverme mas fuerte y poder protegerlos a todos” después de hacer ese juramento Ariel sonrio.

Ariel hizo un comentario al respecto y luego tomó asiento a un lado de Umiko.
El té era realmente delicioso, llenaba tu paladar del esquicito sabor de la miel junto con el sutil aroma de los pétalos rojos de la rosa. Y conforme ibas tomando te dabas cuenta de que las especias le daban un toque mágico a la bebida, lo cual te dejaba con ganas de probarlo una vez mas.
Ciertamente, no lo culpaba por elegir ese té como su favorito.
Observaba su reflejo en la cálida agua que contenía aquella preciosa taza de color blanco, dejándose llevar por el aroma y la armonía del ambiente, tan relajante.
Y era cierto, parecía como si nada hubiera pasado…espera, ahora lo había recordado, ¿Cómo pudo olvidarlo tan prontamente? Levantó rápidamente su mirada hacia el chico de al lado.
“ Todo parecía realmente una película de terror, hasta uno podría decir que fue actuado”.
Umiko dejó la taza sobre la mesa, apretándola con ambas manos mientras las palabras del chico fluían por el viento, su mirada estaba clavada en el interminable cielo azul. La chica solo era capaz de clavar la suya en el suelo, ella se sentía totalmente inútil.
Sin acuerdo alguno la chica volteó a ver a Ariel mientras el también lo hacía, quedando frente a frente la chica logró ver la cicatriz en su ojo.
“pero no dejare que es vuelva a pasar, prometo volverme mas fuerte y poder protegerlos a todos”
Los ojos de la chica parecieron querer inundarse, ella se sentía impotente ante lo sucedido, ella aún seguía asustada con todo aquello. Agachó la cabeza mientras retenía las ganas de llorar ¿para que llorar? No arreglaba nada con eso.
-yo… estaba muy asustada-mirando el suelo-, nunca había estado en una situación así. Jamás… jamás me imaginé que cosas así podrían llegar a mi vida, aunque se que no tengo una vida del todo normal, pero la gente siempre suele pensar que nunca le pasaran cosas así...y creo que no soy la excepción…yo…-algunas lágrimas salen sin avisar- …yo quería ayudar a los demás y no pude… ni siquiera me puedo proteger a mi misma…¿Por qué de repente le decía todo eso a un extraño?
Sentía unas irremediables ganas de llorar, aunque sabía que era una acción inútil, no pudo evitar hacerlo. Se volteó al lado contrario para que el chico no viera su absurda actuación, dándole la espalda por un momento.
-¿sabes? … yo también quiero ser mas fuerte… quiero protegerme a mi misma también, sobretodo, quiero proteger a los demás…-frunciendo el ceño levemente, pero aún con lágrimas en los ojos.
La chica tenía determinación, ahora ya lo había decidido, aunque por el momento no tenía mas opción que dejar fluir esas lágrimas y con ellas desahogar ese sentimiento de miedo, angustia e impotencia mezclados entre sí.
-…de ahora en adelante…
El viento jugaba con sus cabellos, mientras todo a su alrededor seguía tan pacifico como siempre.

“yo… estaba muy asustada, Jamás… jamás me imaginé que cosas así podrían llegar a mi vida y creo que no soy la excepción…yo…..yo quería ayudar a los demás y no pude… ni siquiera me puedo proteger a mí misma” Ariel miro como Umiko expresaba sus sentimientos de aquel evento y como lentamente lagrimas comenzaron a salir de sus ojos, esto consterno mucho a Ariel, el quería evitar que las personas pasaran por ese tipo de sufrimiento, aunque al hacer eso le costara su propia vida.

Cuando Umiko le dio la espalda, Ariel escucho unas palabras que lo alentaron aún más “¿sabes? … yo también quiero ser más fuerte… quiero protegerme a mí misma también, sobretodo, quiero proteger a los demás”, Ariel sonrió se levantó y se colocó en cuclillas frente a Umiko, podía ver como las lágrimas salían de sus ojos y que tan apenada estaba por ello, Ariel con una manga de su chaqueta limpio delicadamente una de las lágrimas de Umiko y le dijo “ está bien que una persona llore, no somos monstruos sin sentimientos, pero si hay algo que he aprendido en la vida es saber cómo superar los obstáculos” Ariel sonrió, se levantó y dijo “Sé que no me conoces bien pero… hagamos una promesa tu y yo.. Entrenaremos arduamente para ser mejor y prometo que no dejare que nada malo te pase” Ariel levanto el dedo meñique hace Umiko en señal de promesa.

Sus lágrimas nublaban su vista, pero no pudieron evitar que reconociera al joven que se había colocado enfrente de ella para limpiar un poco de sus lágrimas con su chaqueta.
La chica se ruborizó levemente luego cerró sus ojos haciendo que sus lágrimas cesaran por un segundo. Después de hablar el chico se levantó nuevamente y expresó: “Sé que no me conoces bien pero… hagamos una promesa tu y yo... Entrenaremos arduamente para ser mejor y prometo que no dejare que nada malo te pase”
Umiko inmediatamente dirigió su mirada hacia el chico de cabellos negros, se talló los ojos y se levantó para cruzar sus meñiques. Una leve sonrisa se dibujó en sus labios y clavó su mirada en el.
-No te preocupes por eso, intentaré no ser una carga para ti… –pinta una sonrisa desafiante- no creas que serás el único que protegerá.
Intentó no dejar escapar mas lágrimas y llenarse de positividad, sin embargo sabía que tenía mucho que recorrer. Aún le faltaba mucho para poder proteger a alguien.
-…creo que primero… tengo que aprender a protegerme a mi misma -agacha un poco la cabeza, pero sin perder la esperanza. Enseguida, levanta un puño en señal de ánimo.
-¡ incoraggiare! –expresó en su idioma natal, a pesar de todo aún recordaba algo de ello- vamos vamos vamos…-dijo bajando su tono de voz- ¡seguro que podré lograrlo!, te juro que llegaré a ser igual o mas fuerte que tu, y cuando llegue ese momento sabré que podré protegerme a mi misma….- ambos puños los levantó al nivel de su rostro el cual demostraba gran determinación.
De la nada sintió ganas de abrazar al joven, ahora se sentía un poco mejor. Ella siempre había sido una chica muy abierta y animada, no se le dificultaba demostrar cariño a los demás. Entonces, abrazó al muchacho en señal de agradecimiento.
- grazie.

Spoiler:

Umiko y Ariel hicieron una promesa de volverse mas fuerte, Ariel se alegro, no solo logro que Umiko dejara de estar triste, tubo la confianza de Umiko, eso era algo que atesoraría toda su vida.

Después de proponer entrenar y mejorar, Ariel de dijo a Umiko “ bueno ya que prometimos mejorar, empecemos con terminar tu tarea sobre los esqueletos que te parece?” Ariel miro a Umiko con una sonrisa en su rostro, tomo el libro que habían sacado de la biblioteca y espero a que Umiko sacara nuevamente su libro de apuntes para continuar con los estudios.

“bueno ya que prometimos mejorar, empecemos con terminar tu tarea sobre los esqueletos que te parece?"
Umiko se aproximó a la mesa y luego sacó su cuaderno con desgane, no tenía muchas ganas de continuar con su tarea, aparte aún no terminaba de beber su té.
A pesar de todo eso, se propuso a terminar con su tarea, no era bueno postergarlo tanto tiempo.
Colocó su bolígrafo en el papel y empezó a escribir mientras pensaba en que mas tarde en su habitación pasaría la información a su laptop para luego imprimirla junto con algunas imágenes de internet. No era mala idea complementar su información con otras fuentes, tenía que llevar un buen trabajo para enmendar lo que había hecho.