Ajustando cuentas. [Priv. Terrance]

Suspiro. No quería ir, sabía que no iba a perder la vida, pero estaría a un simple suspiro de ello. Desde lo que paso con Mi Nyu no había hablado o mirado a Mark, sin contar claro cuando dieron la bienvenida a todos. Y ahora debía de ir a ver al único testigo de lo que ocurrió aquella fatídica noche. Se estremeció, pero no podía dejar que esa noche pasara mas, debía de ir y enfrentar a lo que fuera, por lo menos en el nombre de lo canalla que fue su alter ego.

Se acerco a donde le había indicado Mark cuando le cito, mirándole apenas de lejos. Trago duro. No no podía irse de ahí por ningún motivo. Es por ello que a paso seguro se acerco a donde Mark, quedando a escasos pasos de el.

“Siento la tardanza.” Se anuncio manteniéndose ahí parado sin hacer nada mas que mirar al castaño fijamente.

Las primeras palabras calaron en Terry como baldazo de agua fría. Pero claro que sentía lo que había pasado, era el karma con el que había estado viviendo todas esas noches. Estaba con un trauma completo, que no podía ni dormir bien de solo pensar que su alter ego estaba intentando controlarle y él como idiota estaba comenzando a perder una batalla que antes quería ganar con todas sus fuerzas.

Suspiro, sabía que tenía que confesar lo que había pasado, y no porque fuera Mark el mejor amigo de Nyu o por lo que sea, si no porque lo que había hecho era ilegal, tendría que tener por lo menos un cargo oficial por casi violación aunque el no era el que movilizara su cuerpo en ese momento. Sus ojos arrepentidos por un segundo se dirigieron a los de Mark y de inmediato los desvió. Había pretendido el verlo a los ojos, pero ahora ya no tenía la fuerza de poder hacerlo.

“No recuerdo mucho. De hecho no estuve consciente de lo que paso si no hasta los últimos dos minutos…pero esto es lo que recuerdo.” Comenzó a relatar de cuando escucho como había estado peleando con Mi Nyu a gritos en la habitación, no le dijo la razón, pero menciono que se había descontrolado a tal manera que Max salió desplazándolo a un punto en el que no supo que mas paso si no hasta que escucho a Nyu gritándole de nuevo. Ya cuando estaba pidiéndole ayuda.

Que como pudo salió, encontrándose con una escena aterradora, con ella llorando asustada, después de que Max la tocara. “No tengo idea si le hizo algo mas…yo solo…recuerdo que tenía su mano…mi mano bajo su falda…me separe y fue cuando tu llegaste.” Era lo más vergonzoso que tenia que admitir, sintiéndose como si fuera una plasta en el mundo.

Se lo esperaba, sabía que con solo cerrar la boca después de la explicación que había dado, Mark no podría contenerse y terminaría golpeándolo. Era más que obvio que eso terminaría pasando y simplemente no se resistió. Se dejo golpear, se dejo tirar en el suelo y sin importarle estaba siendo sumiso cuando las manos estaban enterrándose en su cuello causándole que apenas pudiera respirar. Simplemente se lo merecía.

Pero Max no salió. No era idiota su alter ego, sabía que saldría cuando se le pegara la gana, no cuando estuviera el pirokinetico ordenándole a golpes que saliera. No le importo lo que le decía, claro, hasta que menciono a Seth. En ese momento sus ojos se volcaron a ver directamente a los de Mark tratando de comprender las palabras sobre Seth, sobre la fiesta y lo que había pasado. No…él sabía que no se merecía nada de eso. Sabía perfectamente que él no merecía el amor de una persona, ni de él ni de nadie. Estaba manchado por todos lados y era peor cuando Max entraba en acción.

Fue ahí cuando las palabras de Mark calaron en lo más hondo de su corazón haciéndole añicos por completo. El no merecía ni una pisca de amor aunque se lo dieran como regalo. Y Max…seguía sin pretender salir de su interior.

“Ack…” Se quejo ante la falta del oxigeno, su cabeza estaba dándole vueltas gracias al dolor que le daba tanto golpe en su mollera y por las manos apretándole la garganta. Por encima pero podía sentir como la sangre de su nariz ya estaba llegándole a sus labios entintándolos de rojo. “Si es…necesario…” Termino diciendo. Ahí estaba su arrepentimiento. El quería pagar por lo que había pasado con Mi Nyu…así fuera usando su cuerpo lo pagaría.

El segundo golpe lo recibió también sin evitarlo, lo que si es que tosió bastante gracias a que el aire le llego de repente después de ser asfixiado por Mark. La sangre ya no solo salía de su nariz, ahora estaba en sus labios, corriendo por su barbilla en un hilo ya grueso y abundante, podía sentir la caliente hasta su garganta.

Pero los golpes no le estaban valiendo nada, no le dolían –en el modo interior.- lo que más le estaba doliendo eran las palabras que le decía Mark. Apenas se había dado cuenta que amaba a Seth, después del beso aunque él lo hubiera rechazado. Como decía Kruger le decía, el estaba maldito, no se merecía nada, no podía ni controlar su propio poder, hacía daño aun sin quererlo. Estaba podrido.

No entendió como, pero era la primera vez que su cuerpo le estaba clamando que dejara salir lagrimas que al solo sentir aguársele los ojos, las retuvo con lo poco de lucidez que tenia. Era su culpa, era su reverenda culpa. A Nyu le había quitado todo, desde el hombre que amaba hasta la felicidad que tenía en su vida. A Seth…no sabía que le quitaría, pero lo más seguro es que sería todo lo valioso para él. Si…el estaba maldito.

-Te dije que no valía la pena pelear por algo que tenias perdido.- La voz en su interior le hablo. Nunca, nunca quería hacerle caso a Max, pero ahora sus palabras estaban uniéndose a las de Mark, causando que sus ojos se perdieran por completo al escuchar todas esas frases que le decía en su contra. –Yo te dije antes que nada de lo que hicieras serviría ¿No? Yo te dije que las personas no verían lo que tú eres, si no lo que yo soy. Debes de comprenderlo Terry, te miran como me miran a mi…nunca miraran a Terry Maxwell…solo miraran a Max.-

Su pecho subía y bajaba. Ni las marcas en su cuello, ni los golpes en su cara, nada de eso estaba ahora surtiendo efecto como las palabras de Mark y las de Max hablándole al mismo tiempo. Ahora los ojos estaban de verdad aguándosele al punto en el que ya no miraba nada, en el que por si mejilla lastimada caían un hilo de lagrimas, el cual le escocía como si fuera a estarle quemando…tanto como la mano que ahora le estaba por dar.

El no reacciono, se quedo completamente quieto con la mirada perdida, escuchando a su alter ego, que apenas supo que casi le daba aquel puñetazo. ¿Por qué casi? Porque su cuerpo se movió solo. Max lo había movido en un momento, no iba a salir del cuerpo, pero tampoco dejaría que lo dejaran mal herido.

Mark y Max habían destruido todas las barreras del chico. Una oleada de cosas estaban invadiendo tan rápido y tan brusco su cuerpo que apenas y podía respirar, y no justamente por haber sido ahorcado por Kruger. Si, era una basura, era una escoria, se merecía morir después de todas las cosas que había dejado que hiciera su cuerpo sin darse cuenta.

Pero no fue nada comparado como cuando comenzó a hablar de Seth. Seth…el super fuerte lo había ido a buscar, lo había besado…había demostrado que si sentía algo por él y Terry después de corresponderle le había rechazado como pudo. El necesitaba a una persona pura que estuviera con el, no a una manchada como Maxwell ya lo estaba. Necesitaba amor, necesitaba que lo quisieran y lo miraran como la única cosa en la vida y él…él no se lo podría dar nunca.

Sin poder evitarlo se removió bruscamente, con las lagrimas invadiéndole el rostro, lagrimas con el nombre de Mi Nyu y Seth escritos en ellas; se quería sacar de encima a Mark, necesitaba irse de ahí lo más rápido que fuera posible, quería escapar, quería ser libre de todas aquellas cosas que estaba sintiendo.

-Tú sabes cuál es la respuesta a todo tu predicamento…- Como en ocasiones anteriores, se miro a sí mismo en la oscuridad, con solamente Max acompañándole. –Sabes que hay una solución a todo esto que estas pasando.- Le sonrió su otro yo, hablándole de manera suave, casi hasta comprensiva. Como si no fuera él. –El mundo no es para personas como tu Terry, solo los fuertes, los que no sienten nada pueden vivir bien en el, a ti te están destrozando.- Se acerco a Terry dentro de su mente y lo abrazo ligeramente. –Solo te hacen llorar…Kruger no dejara que seas feliz…Mi Nyu estaría mucho mejor si no te mirara mas y Seth…el seria completo con una chica como ella…piénsalo. Si tú no estuvieras muchas cosas buenas pasarían.-

-Pero…-

-Aun tienes tus dudas…pero sé que con el tiempo, sabrás que te estoy diciendo la verdad. Y cuando pase eso…tu serás el que me busque a mi.- Fue así como regreso a la realidad. Rápidamente se alejo de Mark, marcándole un espacio entre ellos, alzando una mano por delante como si se protegiera con ello. “No te…molestes…” Murmuro sintiendo como las saladas lágrimas le corrían por las mejillas y como su rostro estaba hinchándose por los golpes que le había dado. “No me le acercare…Mi Nyu…ella estará con Seth…” Ni siquiera recordó que frente a las personas le decía Raven. “No me meteré…no hare nada para meterme entre ellos. Yo…solo desapareceré…” Eso es lo que él quería hacer ahora…desaparecer.