Despues de un cafe [Priv Sonozaki Shion]

por **Deragae Nisheida** Mar Jun 07, 2011 12:10 am

Habían llegado a la escuela a un paso relativamente lento, al rubio le había sido embarazoso permitir que Shion le ayudase a caminar pero no había remedio no se sostenía por sí solo. Quizá si hubiera dormido en aquel callejo un rato si podría, pero era exponerse a ser golpeado por cualquier transitante. Por lo que se había tragado el orgullo y rodeado a Shion con el brazo para apoyarse en la fémina y caminar hasta la academia. Presionaba la toalla que la peli verde le había dado para detener la hemorragia, le resultaba de lo mas frustrante que su poder se basara en la sangre y en ese momento no pudiera frenar una simple hemorragia.

-Lo siento Sonozaki... parece que me falta entrenamiento - se disculpo con la chica cuando ya habían emprendido el camino hacia la enfermería – pensé que estos dos años aquí me harían mas fuerte .…

Cuando entraron a la enfermería parecía que a la enfermera le daría un ataque cardiaco, porque casi le arranca el brazo al rubio cuando tiro de él para ponerlo en una camilla de ahí y comenzó a pasarle las manos por el rostro sin dejar de preguntarle si tenía sentido del tacto o si le dolía, o si no tenia mas heridas, a lo que el chico no podía contestar ante tanto sofoco, no le gustaba ser tocado y ahora lo estaban haciendo en exceso.

-¡Suélteme! – Alcanzo a decir apartando a la enfermera y sentándose sobre la camilla – solo recibí un golpe ¿está bien? – le dijo algo irritado – antes que a mí por favor revise si Sonozaki no tiene nada – le indico a la doctora señalando a quien le había ayudado. La enfermera se aproximo hasta Sonozaki para ver si tenía algo, pidiéndole que tomara asiento y que le indicara cualquier mal estar.

En tanto el rubio sostenía la toalla sobre la hemorragia, no tenia deseos de ser atendido en la enfermería, solo quería dormir un rato y sabia que podría remediar aquel golpe el mismo cuando tuviera un poco mas de energía para usar su poder de nuevo, la realidad era que la frustración de quedar en tal estado por una simple pelea con tres borrachos le era más molesta que la herida en sí, y por alguna razón, le avergonzaba en especial que hubiera sido frente a Sonozaki…

por **Sonozaki Shion** Mar Jun 07, 2011 7:35 pm

Aqulla amable enfermera había llegado a donde Shion para revisar si tenía alguna herida, a pedido del joven rubio que ahora se encontraba tendido en la cama. La enfermera comenzó a verificarla.

-No se preocupe, señora. - Respondió con una amable sonrisa. -Estoy bien.
-¿Segura, niña? - Preguntó preocupada, a lo que Shion ascendió con la cabeza.
-Si. Segura.
-Bueno, pero intente convencer a su amigo para que se le trate la herida.
-¡Sip! - Asciende con la cabeza. -¡Dejemelo a mi, nee!
-Bien. Más tarde pasaré por aquí a ver como ha quedado todo.
-¡Arigato! - Agradece mientras ve a la enfermera irse. Espera unos segundos para levantarse y cerrar las cortinas que le permitían la visión a aquella pequeña esquina. Después de hacerlo se dirige a donde Nisheida, dándole un beso en la mejilla en señal de agradecimiento.

-Dera-kun, se que apenas nos conocemos, pero... - Lo ve al rostro. Aquel dulce ángel se veía tan tierno a pesar de estar enojado... Camina apartandose de su lado, lavándose las manos con agua y jabón en un pequeño lavadero que había allí, para luego comenzar a tomar agua en un envase mientras hablaba.-Deberías dejar que te atiendan la herida. - Tomó una toallita. -No quiero que tu herida se infecte a causa de tus caprichos. - Se acerca a el poniendo el envase sobre la cama. -Al menos permite que sea yo tu enfermera... - Le sonrió levemente mientras mojaba la toallita en el agua.

-Permiteme... - Puso su mano sobre la de el. Le miro a los ojos con una agelical sonrisa esperando que este apartara su mano de su herida para comenzar a curarle.

por **Deragae Nisheida** Mar Jun 07, 2011 11:30 pm

Aquella enfermera al menos lo había dejado en paz, si tan solo no se hubiera distraído o hubiera sido más rápido hubiera evitado ese golpe y nada de eso hubiera pasado, a su lado el pequeño roedor simplemente se estaba peinando mirando la pequeña conversación que tenían la encargada de la enfermería y Sonozaki El rubio mientras tanto tenia la mirada fija en un punto indefinido ¿no le había enseñado su maestro a no dejar que el enemigo le sacara ventaja?, tenía que admitir que dos años en la academia le habían ayudado con sus poderes pero menguado en cuanto a aquella actitud que se le había formado en china, hacía dos años quizá aquellos ebrios no hubieran podio levantarse más después de que el rubio hubiera peleado. Quizá en vacaciones volviera al oriente a enderezar el camino que había iniciado como practicante de las artes marciales de aquel país.

Sin darse cuenta volteo para ver si la peli verde ya era atendida, pero en vez de eso se topo con un beso en la mejilla por parte de esta, ¿le había besado? ¿Eso no era actuación verdad?... que… pasaba… quedo momentáneamente sin reacción mientras un ligero sonrojar se mostraba en sus mejillas y veía como la chica se lavaba las manos para atenderle su herida. Cuando esta llego para limpiarle la herida, Nisheida inflo las mejillas ante el comentario de que podía infectarse por el capricho de este de no ser atendido. Muchos decían que era un gesto infantil, pero quizá era la única costumbre ue conservaba de cuando era niño, lo demás ya había desaparecido y por mas, era ya natural que así refunfuñara algo, estuviera actuando o no.

-No es capricho… solo que… no me gustan los doctores – se justifico, o más específicamente no le gustaba que lo tocaran, algo realmente retorico, porque no tenía problemas en ser golpeado en una pelea, en fin, detalles de su personalidad – e… está bien – espeto cuando Sonozaki se ofreció a ser su enfermera, estaba un tanto apenado hacia con ella, pero parecía que la chica realmente quería darle las gracias por aquello. Cuando esta llego con la toalla humada, retiro la que sostenía el mismo para dejarle ver la herida, la cual al ya no tener presión dejo escapar un poco más del liquido carmesí que resbalo por la cien del estudiante de crusaders. – A mi no me importa la herida Sonozaki... pero… no debería sir por lugares tan peligroso… la próxima vez podría pasarte algo – le indico dejando que le limpiara la herida…

por **Sonozaki Shion** Miér Jun 08, 2011 5:03 pm

-Que no te gusten los doctores no justifica que no vayas al hospital a cuidar de tu salud. - Le pone el dedo índice en la nariz mientras ríe levemente. -No me des esa justificatoria, Dera-kun, que no hay nada más importante que la salud física y emocional de una persona.

Hablaba justamente aquella que había dejado de tomar sus medicamentos de esquizofrenia y bipolaridad por que simplemente le había apetecido...

-Por ende... - Comenzó a limpiar la sangre seca que había caído por su rostro y la sangre fresca que estaba cayendo. -Quiero que de ahora en adelante vengas a curarte. No me gustaría que te hicieras una herida y por no tratartela se te pegara alguna hepatitis, tétano, o alguna infección peor, ¿si? - Comenzó esta a desinfectar su herida, algo que podría arderle al rubio. -Y sobre mi, si, fue mi culpa. No me fije por donde andaba por estar pensando en otras cosas. Es la primera vez que me pasa. Pero lo tendré en cuenta para alguna otra ocasión, Dera-kun. - Sonrisa gentil. -Levanta un poco tu cabeza. - Dijo mientras tomaba unas bendas y cuando este levantó su cabeza le comenzó a bendar.

La peliverde le estaba dando un pequeño regaño, pero lo hacía de manera que se viera como un consejo a pesar de la firmeza de sus palabras. Juego de palabras, tal vez. Pero estaba claro que eso lo hacía por su bien.

por **Deragae Nisheida** Miér Jun 08, 2011 7:45 pm

El rubio miro hacia otro lado cuando la fémina peli verde había soltado su primera reprimenda, ya lo sabía, nadie le daba crédito a esa justificación para que el evitase ir a la enfermería. De todas formas no terminaba por gustarle estar en tal sitio. Aun tenía un poco de aquel inflar en sus mejillas que le daban aquel aire infantil, pero se había reducido conforme escuchaba las palabras de Shion. Realmente seria irónico explicarle que enfermedades que pudiera correr por la sangre, tales como tétanos o hepatitis, estaban fuera de los riesgos que corría el rubio, su control sanguíneo bien le permitía bloquear muchos microorganismos de todo tipo, era por ello que en ocasiones le habían sugerido ir a algún consultorio médico y ofrecerse para desarrollar anticuerpos para vacunas, ni que decir que siempre decía que no, no era un maldito conejillo de indias ni rata de laboratorio para eso.

-Chist… - soltó cuando la chica comenzó a desinfectarle su herida a causa del ardor que le había producido, pero pronto había acoplado el sentir y había dejado de quejarse. Al menos Shion estaría bien de ahora en adelante, mientras no volviera a deambular por aquellos rumbos, podría estar tranquilo espera ¿Por qué estar tranquilo ahora?, no tenia porque necesaria mente estar al pendiente de ella… aunque ciertamente saber que no se había lastimado en aquel sitio le había producido una sensación de calma que no sentía hacia bastante tiempo.

Cuando le pidió levantar la cabeza lo hizo, topándose con los ojos de la peli verde, ya iban varias ocasiones y sin embargo no pudo evitar volver a contemplarlos, fijamente.. largamente, como si hubiera algo que le hipnotizara de aquellos orbes que le miraban. Podía alegar simplemente que eran bellos, si… pero verlos tanto tiempo podía rayar en lo indecente e incomodo… pero era algo que no podía evitar. Retiro la mirada rápidamente, no quería volver a crear otra situación incómoda… aunque no pudo evitar mirar de reojo.

-Sonozaki... gracias por atender mi herida – le agradecía sin saber que más le podía decir. Poso su mano sobre la mejilla de esta mientras le sonreía – supongo que mientras sea yo y no tu el que tenga esto está bien – termino para sonreírle y reir un tanto.

por **Sonozaki Shion** Vie Jun 10, 2011 1:00 am

La peliverde le estaba dando los toques finales al curar del rubio sin darse cuenta de que este se había quedado admirando su belleza. Una sonrisa serena se mantenía en su rostro. Si no fuera por que tenía como prioridad la actuación, tal vez se hubiera dedicado a ser doctora, pero eso era un mero "quizás", algo que cruzó por unos momentos sus pensamientos. Pero el rubio había dicho algo que le hubo llamado la atención.

-Supongo que mientras sea yo y no tu el que tenga esto está bien.

La chica negó con la cabeza sin que aquella sonrisa abandonara su rostro.

-No quieras llevar todo el peso sobre tus hombros, Dera-kun. Tu vida es igual de importante que la mia, y viceversa. Si algo te llegara a pasar yo... - Acto seguido, paso sus brazos alrededor de su cuello y lo aferro suave contra su pecho. -...no se que haría... - Puso su cabeza sobre la de el y cerró sus ojos. Se mantuvo en silencio durante un breve periodo de tiempo mientras masajeaba al rubio por el area de la nuca, entrelazando sus dedos en sus cabellos.

-Descansa, Dera-kun. - Puso sus labios sobre sus cabellos como si quisiera darle un beso. -Cuando venga la enfermera, por favor, deja que te atienda, ¿si? - Se apartó de el. -Te dejaré solo para que descanses. - Le volvió a poner su dedo índice sobre la nariz, aun manteniendo aquella sonrisa. -Duerme bien. - Hizo una leve reverencia antes de darse la vuelta y salir del cuarto, pero... -Por cierto, Dera-kun. - Se quedó en silencio por unos momentos. -Hay un lugar que me gustaría enseñarte, pero tiene que ser en la noche. Algun día te llevaré, ¿si? - Se dio la vuelta y le dedicó una gran sonrisa, para luego irse del lugar para dejarle descansar.

por **Deragae Nisheida** Lun Jun 13, 2011 10:34 pm

Tras sus últimos vocablos Nisheida había obtenido una negación por parte de la hermosa peli verde, ¿Qué su vida era tan valiosa como la suya?, eso era lindo de oír, poca gente realmente consideraba su vida de igual valor que la de los demás, pero lo que más le sorprendió fue el abrazo que esta le dio o más bien como se lo dio, considerando que quedo apegado al pecho de la chica.

-No… te preocupes Sonozaki – le dijo bastante sonrojado por aquel abrazo, cuando esta lo soltó miro hacia otro lado en un afán de que esta no se percatara de ello –va.. Vale – le respondió ante el comentario de la enfermera. Ni loco iba a dejar que esa mujer estuviera tocándolo todo el día, diría que estaba bien, descansaría un poco y podría cerrar la herida por sus propios medios, no necesitaba que le estuvieran vigilando y supervisando por una cosa tan ínfima. Sonozaki había hecho más que suficiente ya con la herida.

Cuando esta se fue declaro que deseaba llevarlo a cierta parte ¿A dónde?, ¿un lugar secreto? ¿O simplemente uno que le gustaba visitar?, el no era alguien que gustara de meterse en los asuntos de otros, pero no podía negar que le había picado la curiosidad. Le vio salir por la puerta y aquello le provoco un pequeño hoyo en el estomago, el cual asocio con el hambre aunque no podía ser aquello. Suspiro antes de recostarse en la camilla y cerrar un momento los ojos, y por raro que pareciera la primera imagen que visualizo fue la chica, que poco a poco se desvaneció conforme el chico se fue quedando dormido.

Sin embargo el segundo ocupante de la camilla no quiso dormir y como su amigo suspiro antes de saltar de ella y pasar por debajo de la puerta apretándose como solo un roedor podría hacer y yendo detrás de la fémina. Cuando le dio alcance llamo su atención golpeando su pie con su patita mirándole y soltándole un par de “guyus”. Lamentablemente parecía que el rubio era el único capaz de entender lo que el ratón expresaba, pese a que este alegaba que el roedor se comunicaba muy bien y no entendía porque los demás no podían comprenderle.

En todo caso el ratón señalaba de nuevo a la enfermería y le pedía con un gesto de su patita que le siguiera de nuevo a donde el rubio quizá ya se hubiera quedado dormido.

por **Sonozaki Shion** Mar Jun 14, 2011 12:35 am

Shion dejó caer su cabeza de lado cuando vio como aquel roedor había ido por ella. Pudo ver como este se expresaba en su idioma "ratonal", diciéndo muchos "guyu" y señalando con sus patitas a la enfermería.

Al no poder entenderlo, lo primero que paso por la mente de la peliverde fue que le había pasado algo. Esto la asustó y lo unico que hizo fue perseguir al roedor sin cuestionar nada. Y tampoco es que lo pudiera hacer por que no podía hablar el idioma de los animales. Por ende, tan solo se digno a perseguirle.

Por el camino iba tal vez pensando que la enfermera había ido a visitarlo y el, como niño al fin, se había puesto a armar algun tipo de espectáculo. Si, niño, por que Shion se había fijado que aun tenía algunas facetas de niño, algo que ella consideraba bastante tierno. Así que tan solo se apresuró al llegar al lugar siguiendo al ratoncito.

Una vez llegó al lugar y abrió la cortina, pudo ver que el rubio estaba durmiendo como un ángel. Esto casi le saca un grito de emoción a la peliverde, quien tuvo que suprimir el querer gritar como una fan desquiciada cuando ve a su artista favorito para no despertarlo, y tampoco para no armar ningun tipo de alboroto dentro de la enfermería. Poco después bajo su mirada al roedor y le sonrió gentilmente...

-Gracias. - Dijo en voz baja a pesar de que no sabía si iba a entenderle o no, pero al menos, quería intentarlo. Luego subió su mirada al joven y se quedo contemplando en silencio y con una sonrisa en el rostro a su gran amor secreto.

por **Deragae Nisheida** Miér Jun 15, 2011 12:26 am

El ratón había conducido a la fémina hasta la enfermería nuevamente, pasando por debajo de la puerta ante la imposibilidad de abrirla fácilmente por el mismo. Par cuando Sonozaki entrase y viera al rubio dormido, el ratón ya estaría hurgando en la chaqueta que el oji cenizo había dejado doblada a los pies de la cama, perdiéndose un momento entre los doblajes y bolsillos de esta, en tanto parecía que la chica se conformaba con mirar al dormido estudiante, aunque se movia un poco, quizá el encuentro con aquellos pandilleros le había traído de nuevo un par de recuerdos muy desagradables.

-ki… - se oyo espetar al rubio, el cual se había movido aun estando dormido y parecía que no tenia un sueño placentero en realidad, eso se podía ver por la manera en que fruncía el ceño aun dormido. Tras unos segundos lo relajo quizá volviendo a un estado más apacible – Ka…ra…me – espeto aquel nombre, como un deseo, como si aun entre lo que veía dormido pudiera estar con aquella a la que había nombrado.

Sin embargo antes de que nada mas pasara el ratón salió de entre la chaqueta del rubio cargando un pequeño porta fotos el cual estaba cerrado. Bajo de la cama para ir hacia la chica y extenderlo hacia ella. Nuevamente espetando un par de repetidos ”guyu” para tratar de comunicarse con ella y agitando el porta fotos para que lo tomara. En cuanto esta lo hiciera el ratón se tomaría la libertad de trepar por ella para llegar hasta su hombro, aparentemente el exceso de cariño demostrado en aquel abrazo que casi lo había dejado noqueado en el restaurante, había sido simpático incluso para el roedor.

-Guyu! – volvió a soltar señalando el porta fotos con su patita y agitándola con insistencia. El porta fotos era de oro labrado, y se veía a simple vista que era de varios kilates, llevaba grabado un emblema que parecía una marca y la palabra “Voglio” en Italiano. Si la chica obedecía al ratón (cosa nada rara para el porqué tenía la costumbre de conseguir lo que quería). La peli verde vería una única foto, aparentemente de varios años atrás, donde se veía a cuatro personas, y de fondo una gran mansión, en la parte de atrás estaba un hombre de gran porte y elegancia y a su lado la que parecía ser una joven y hermosa mujer, sin embargo los rostros de ambos estaban quemados en la foto, y parecía que con precario cuidado de no dañar lo demás.

Enfrente estaban dos niños, a la derecha claramente Nisheida, más pequeño y con una sonrisa que aunque parecía cansada… sincera, y a su lado tomándolo de la mano, estaba una pequeña niña que tenia los mismos ojos de tono grisáceo que su hermano. En su hombro el ratón señalo a Nisheida espetando un nuevo “guyU”

por **Sonozaki Shion** Jue Jun 16, 2011 12:16 am

Shion había escuchado como Nisheida pronunciaba un nombre entre sueños, algo que la desanimó totalmente, haciendo que la peliverde bajara la cabeza mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

"Tiene novia... Y yo aquí haciéndome ilusiones como una estúpida..."

Iba a salir del cuarto cuando el ratón llegó nuevamente hacia ella, tendiéndole lo que parecía ser un album de fotos. El pequeño roedor estaba insistiendo en que lo abriera, y esta hizo caso, para ver aquella foto que parecía familiar. Por el momento Shion no entendía por que era que Toshimaru le estaba mostrando aquello, pero parece que quería que hiciera algo. Sus ojos comenzaron a brillar cuando vio a Nisheida de niño...

-Pero que...

Si... Ojon... ¡¡Que cosa mas monaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!! En aquellos momentos quería gritar de la emoción. ¿Cómo era posible que fuera tan bello? Bueno, nunca había dejado de ser bello... ¡¡Que cosa ojona tan hermosaaaaaaaaaaaaaaaaa!! Ahora quería que sus hijos salieran ojones tambien. Decidido. Quería un ojón.

-Que cosa linda... - Dijo por lo bajo sin poder sostener más la emoción. Luego volvió su mirada a Toshimaru. -Pero... ¿Por qué me muestras esto? - Pregunto un tanto confusa.

por **Deragae Nisheida** Jue Jun 16, 2011 12:49 am

El sueño del rubio no había sido interrumpido por la ligera emoción de la peli verde cuando había abierto aquel álbum de fotos. A decir verdad parecía que su sueño se había vuelto un poco más tranquilo después de que había soltado el nombre de la niña que acababa de ver Sonozaki en la foto. En tanto el roedor había estado mirando a la chica todo el rato, incluso cuando había soltado aquel comentario de Nisheida, y tal como este el ratón hay soltado un pequeño suspiro, eso hasta que había escuchado la pregunta de la fémina al respecto.

-Guyu – se expreso cruzándose de patitas y enfocando su mirar en Shion. Desde su hombro corrió o se deslizo hasta la mano que tenía el porta fotos para sostenerlo y que viera la parte de atrás, la cual tenía un grabado mas, el cual rezaba en italiano: L'amore resta ... memorizzati nel cuore perduto (El amor quedo atras... guardado en el perdido corazon), sin emabrgo aquellas palabras parrecian haber sido escritas a mano y no grabadas en el porta fotos. La caligrafia fina era de Nisheida, aunque no era ta estetica como ahora, si no un poco mas infantil. El raton volvio a señalar a Nisheida antes de saltar a la cama con el porta foto.

Espetando repetidas veces aquel sonido peculiar suyo, señalaba la foto y luego al joven que seguia dormido. Aparentemente triste por ello. De improviso y de maner amas brusca señalo a Shion, la jove podria ver seriedad en los ojos del roedor, que comenzo a sotener su cola y a jugar con ella mientras se balanceaba, haciendo quiza una comica imitacion del caminar de una chica, para luego señalar a Nisheida. Tras ello señalo a la peli verde y de nuevo al rubio para queel punto quedara claro.

De cualquier forma si Shion no habia entendido, aprecia que tenai un aliado, porque parecia que contaba con una alianza con el roedor para lograr el objetivo que parecia, Toshimaru ya habai visto en la chica.

por **Sonozaki Shion** Sáb Jun 25, 2011 2:42 pm

La peliverde se quedo anonada con las acciones que estaba haciendo el ratón. Al principio, no sabía que estaba intentando hacer. Creía que de algun modo estaba animandola. Pero cuando se fijó bien, estaba imitando una mujer. Y encima estaba señalándola a ella y al joven con tanto enfasis, que poco a poco no se le hizo tan difícil ascimilar que era lo que quería decir el pequeño roedor. Lo unico que pudo hacer fue regalarle una leve sonrisa.

-No te preocupes, Toshi-kun... - Dijo en un tono de voz bajo para no despertar a su Nishi. -...haré lo que sea posible por cuidarlo, por hacerlo feliz. - Guardó silencio por unos momentos. -Y si es posible, daré mi vida por que así sea. - Le hizo una pequeña reverencia a Toshimaru. -Muchas gracias por compartir esto conmigo, amigo...

Shion estaba muy agradecida con el pequeño animalito. No esperaba que el estuviera depositando su confianza en ayudar a arreglar el corazón de su mejor amigo, o eso era lo que ella había entendido. Se quedó ahí en espera a ver que más iba a decirle el roedor, y de no haber nada más, se iría caminando del lugar por la dirección que había tomado antes.

por **Deragae Nisheida** Sáb Jun 25, 2011 11:42 pm

El ratón había sido muy explicito con sus intenciones y parecía que la peli verde contaba con todo el apoyo del roedor, el cual, podía ella no comprender hasta que punto el animalillo influenciaba en el rubio, y como este era capaz de tener un duelo mental con el mismo. Generalmente nadie creía en la capacidad sobre animal que tenia Toshimaru. El pequeño ratoncito suspiro y levanto su patita en lo que podía considerarse una señal de “ok”, para la peli verde cuando esta hablo tras interpretar, de manera correcta, la mímica de pequeño.

-Guyu – soltó una última vez pidiéndole que le entregara el porta fotos mientras se ponía de puntitas para acercarse un poco más a la chica.

Sin embargo, la peli verde quizá se sorprendería cuando Toshimaru saltase de improviso para arrebatarle aquello que el mismo le había dado y corriera a toda prisa a devolverlo a la chaqueta de Nisheida. Pronto Soonozaki vería que el oji cenizo se estaba despertando.

-¿Qué pasa? – espeto quizá aun medio dormido mientras pasaba la diestra por la mata de cabello que parecía nunca ser peinada por el muchacho. Saliendo de la chaqueta de su amigo, Toshimaru se llevo una patita a la altura del hocico pidiéndole a Shion que guardase en secreto la revelación que le había dado.

-Guyu – volvió a espetar saltando y quizá dando una patada con su patita en la frente de Nisheida, que había empezado a incorporarse y con el impacto causado por el roedor se había vuelto a acostar.

-¡uch!... no tenias porque…. – comenzó a protestarle, pero se interrumpió cuando reparo en la presencia de la fémina – Sonozaki… ¿sigues aquí? – pregunto creyendo que la chica había permanecido con el todo el tiempo – te dije que no era necesario... estoy bien, enserio, puedes ir a descansar- le dijo con una sonrisa que parecía apenada por haberle preocupado.

Por su parte, sobre Nisheida Toshimaru le guiño un ojo a la chica antes de caminar y colocarse al lado de su compañero para acurrucarse en la almohada y disponerse a dormir el también.

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