Recuperacion [libre]

Había pasado dos clases bastante estresantes para el peli negro, sabia que seria duro pero era mas de lo que el peli negro se había imaginado. Necesitaba despejar su mente aunque fuera una tarde, había terminado apenas la clase del profesor Enzo, por desgracia el peli negro no había podido a completarla y se sentía algo deprimido por lo que había pasado, había fallado en algo tan sencillo y para el eso no era aceptable. Necesitaba estar un momento a solas para ordenar sus pensamientos, había prometido volverse mas fuerte y desarrollar sus poderes, salió de la enfermería, tenia una parte de la cabeza vendada, al parecer había recibido un fuerte golpe en la cabeza y necesitaba estar en reposo por lo menos un día pero decidió escabullirse fuera de la enfermería, tenia demasiados pensamientos en la cabeza y no podía dormir.

Caminado por los pasillos vio unas escaleras que subían a la azotea y decidió subir pensando “un lugar solitario y tranquilo donde puedo pensar y ver las instalaciones de la escuela, es justo lo que necesito” subió las escaleras hasta llegar a la puerta que conducía fuera a la azotea. Al abrirla pudo ver una enorme explanada donde se podía ver perfectamente las instalaciones, lo rodeaba un barandal con flores de todos tipos, realmente era un lugar muy tranquilo. Decidió acercarse al barandal, pudo sentir el aire golpear suavemente su rostro y un hermoso atardecer a lo lejos que tenia de color anaranjado rojizo los campos de la escuela, era un lugar muy pacifico para el peli negro. Respiro hondo, relajándose completamente para que una sonrisa tranquila adornara su rostro por completo, siempre se había reocupado pro los demás pero ese día solo pensó en preocuparse en recuperarse por completo.

Ese día había sido algo duro para Sora, pero al final pudo sobrevivir. Ya tenía tiempo en que no descanzaba ni un poco, y esa tarde tenía tiempo libre. Desde hacía dias unas compañeras de su salón le habían recomendado ir a la azotea, puesto que sabían lo facinante que era para la albina ver el cielo y los lugares totalmente despejados, así que decidió ir a visitar aunque sea un rato ese lugar.

Al momento de salir de su habitación tomó un cuaderno de dibujo, un lápiz y un borrador por si se le ocurría dibujar algo. Ella era conciente que no dibujaba muy bien, pero aún así le gustaba hacerlo, pues le ayudaba a reflexionar y ser ella misma.

Mientras se dirigía a la azotea podía observar como poco a poco atardecía "Espero que al llegar aún halla un poco de luz" pensó.

Subió poco a poco la escalera, disfrutando el recorrido. Cuando abrió la puerta sintió el viento fresco recorrer todo su cuerpo. Al momento de llegar no podía ver del todo bien, pues la luz del sol le incandilaba un poco, pero poco a poco fue acostumrándose y se dió cuenta de el hermoso panorama que le rodeaba: Parecía que se encontraba cerca al cielo, el lugar era extenso, no demaciado pero si lo suficiente como para correr de un lado a otro y poder parar antes de caer. También le gustaba que ahí hubiese enredaderas de flores.

Estaba tan emocionada que comenzó a dar saltos por todos lados hasta que chocó contra "algo", o más bien dicho alguien. Durante todo ese tiempo no se había percatado de la precencia de un muchacho alto y herido (pues tenía una parte de su cabeza vendada).

Sora se quedó durante unos instantes sin saber que hacer - Lo-lo-lo-lo... - era lo único que podía pronunciar.