Camerún

Las calles son concurridas y la situación es muy diferente a lo antes visto. Se denota la civilización de inmediato.

Cerca de ahí, se encuentra una persona conocida por los chicos solamente esperándoles.



Solo un post por alumno. Para tener mas fluidez.

"Vamos en el minuto 10 de la primera parte, saca un pase largo la defensa y le llega a Bassong en la media, los daneses Jorgensen y Poulsen le cierran el paso para que el mediocampista Camerunes haga el cambio de juego con Alexandre, quien hace el recorte con Webó el cual es detenido en seco por el de la playera blanca Sorensen, Webó hace la pared con Emaná y logra filtrar la pelota hasta el estrella Samuel Eto´o quien queda solo frente al portero, se avalanza, hace el corte, la bombea ligeramente para sobrepasar al arquero y..... GOOOOOOLLLLL!!!!!" son las palabras que resuenan en las orejas del rubio, -"Buena combinación"-, viniendo del narrador del encuentro que estaba siendo avistado por un halcón amarillo posicionado encima de uno de los reflectores del estadio Omnisports, situado en el mero centro de la ciudad, también siendo de los lugares con mayor rango de visión.
Despues de que el marcador aumentara a 1-0, Rhy vuelve la vista a la ciudad, ya venia siendo tiempo para que los alumnos se adentraran en la ciudad.
-"Dudo que resultaran con problemas después de este paseo por el campo"-, volteando a ver las calles se encuentra con un jeep peculiar ya que los integrantes eran todo menos africanos. -"Ya era hora"-, abre las alas y se dirige a uno de los edificios aledaños al camino que va tomando el jeep, a esperas de que se estacione y el rubio pueda destranformarse y recibirlos.

Tras el gran viaje y cansado sobre el carro, donde solo podían apreciar el lindo paisaje de aquel lugar, era algo cálido, pero de alguna manera sobre carro era agradable. Pronto llegaron a Camerún, la chica no pudo evitar liberar un suspiro de alivio de que el camino haya sido seguro.

A lo lejos apenas diviso aquel maestro, de aquella clase tan riesgosa que los había hecho pasar, recordando que esa clase no fue nada comparado con lo que habían pasado aquí, el jeep se detuvo estacionándose cerca de un edificio y comenzaron a bajar.

Bajo con cuidado, hasta pisar tierra firma,

-Gracias señorita Akela- le dijo haciendo una leve reverencia, para luego esperar a su compañeros que también bajaran, sentía una gran liberación por dentro, como si repentinamente algo que apretaba sus pulmones estuviera siendo ligeramente apartado poco a poco, para que pudiera respirar con tranquilidad.

El viaje se le hizo largo, tal vez por cansancio o tal vez por las enormes ganas que tenía de volver a la pacífica academia. El viento sacudía su cabello gentilmente mientras en silencio observaba de vez en cuando el rostro de sus compañeros, algunos hablaban entre si y otros como Jake simplemente descansaban.
Al levantar la vista pudo ver que la tupida selva iba quedando atrás para darle paso y lugar a una ciudad bien marcada como tal y con calles muy concurridas. Cuando el jeep se detuvo Alina se puso de pie en silencio, tomando su mochila se bajó del vehículo al mismo tiempo que Aydan y observó los alrededores, realmente era una ciudad llena de gente yendo y viniendo, muy diferente a la jungla enla que se encontraba apenas hacía unas horas.
-Quiero volver…-dijo suavemente para ella misma-
Con una leve inclinación ante la chica Tutsi agradeció amablemente y luego se acercó a sus compañeros, apenas tenía fuerzas para caminar, aún así cargando su mochila sobre su espalda esperó a que emprendieran camino; esperando que prontamente pudiera llegar a la academia para darse un largo baño e intentar olvidar todas aquellas desagradables imágenes que parecían querer imponerse en su mente sin piedad alguna.

El paisaje cambio a medida que avanzaban, ahora se encontraban en Camerún, cuando el vehículo paro, el salio disparado en busca de un baño, tenia nuevamente arcadas y no quería que le vieran devolviendo la nada de su estomago, ni Mark, ni su amigo Jake que se dispuso a dormir todo el viaje, no quería preocuparles, si es que se preocupaban por el.

Encontró un baño y devolvió lo que ya no tenia, estaba mal, parecía que su propio cuerpo quería purgarse de la sensación y las memorias que adquirió durante esos días, pero de seguir así, quizás se enfermaría, aunque no fuese realmente así.
"No, basta... no pienses en esas cosas" negó con la cabeza lentamente dentro del cubículo del baño, no le hacia bien pensar en cosas negativas, porque si seguía se acordaría de su hogar, del verdadero hogar en noruega y no el hogar feliz junto a su tío.

Habían caminado bastante, pero era más bien el hecho de que ya estaban agotados de tanto caminar, pronto divisaron a lo lejos la frontera de Camerún, y comenzaron a caminar un poco más animados, pues sabían que ya faltaba poco.

Al llegar miraron a lo lejos un jeep con lo que parecía ser sus demás compañeros de clases eran Jacob (quien Dylan aún no conocía), Aydan, Benedict, Swithin, Mark y Alina, inmediatamente su vista se enfocó en aquella chica, y se quedó un momento mirándola como si no pudiera creer que estuviera ahí. Camino un poco más hasta quedar donde estaban todos, y sin dudarlo ignorando todo lo demás se acercó a ella con intensión de abrazarla, pero luego observo que su calzado y algunas otras partes que no había podido limpiar por falta de agua estaban con manchas de sangre al igual que todos los demás que habían bajado del Jeep,

-Q-que les paso?- pregunto mirando a todos los demás, para luego dirigirse con Alina - Estas bien? estas herida? te duele algo? - la invadió con preguntas realmente preocupado por su estado, a pesar de que era la menos sucia de sangre, Alina se quedó muda pues parecía que no sabía que responder, para solo acercarse a ella realmente preocupado a darle un abrazo de manera cálida recargándola contra él,

-Qué bueno que estés a salvo, estaba preocupado por ti...- dijo sin soltarla, para luego percatarse que podía ser observado, se separó de ella ruborizado, para moverse a un lado de ella mirando a todos, mientras le sujetaba la mano sin pretender soltarla. Luego tendría que preguntarle qué es lo que había sucedido, con más calma.

Durante todo el viaje hasta Camerún, había dormido, lo necesitaba, su cuerpo y su mente se lo pedían por lo que apenas sintió al rubio a su lado y apoyo suavemente su cabeza en su hombro, quedando en los brazos de morfeo rápidamente, se sentía seguro y a gusto con la presencia de su pareja a su lado.

Fue despertado de golpe al sentir como Swithin se baja del Jeep con rapidez, llevándose un buen golpe en la cabeza-...Ouch -susurro, levantándose y sobándose la cabeza con suavidad. Se preocupaba por el noruego.
-Gracias por todo, señorita Akela -se bajo del automóvil, sonriendole a la mujer- Si me disculpa -murmuro antes de ir a buscar al nórdico.

Se acerco hasta la puerta del baño, escuchando como Valentine devolvía el estomago, frunció el ceño. Toco un par de veces- Swii, te estoy escuchando, déjame ayudarte un poco -murmuro.
Todo ese viaje había sido cansado, ya estaban en Camerún, esperaba que por fin todo terminaran y pudieran volver a la Academia. Él y Valentine lo necesitaban.
"Me encantaría darles por culo a los maestros" pensó el pyrokinetico.

Caminaba observando alrededor. A medida que habían ido avanzando, habían empezado a aparecer edificios. Y habían llegado a tal punto que se sintió de otro mundo. Algunas personas les observaban extrañados.
Seth tenía algo de color en los hombros por el sol, y aunque no iba mal aseado, se notaba que había llevado varios dias con la misma ropa, así como las botas estaban un tanto desgastadas.
-Mira tú por donde...
La coreana despertó, bajándose enseguida de su espalda. Seth la observó alzando una ceja en un largo silencio, guardando luego sus manos en los bolsillos.
-Eh, era lo que me tocaba. Y buenos días.

Dicho esto, vio a lo lejos a más gente, y sonrió amplio.
-¡¡¡Mark!!! -Exclamó animado.
Corrió mirando unos segundos si venían algunos coches, puesto que su pequeña maratón la hizo con el semáforo en rojo para peatones.
Placajeó al pirokinético para agarrarle por el cuello con un brazo y despeinarlo amistosamente.
-¡Pero si estás de una pieza, hahaha! -Rió por lo alto, desprendiendo una imagen del peliplateado poco común- ¡Tío, mírate que pintas!
Aunque él tampoco podía alardear de las suyas. Miró un momento hacia atrás, a sus demás compañeros, y esbozó una leve sonrisa en sus labios, levantándoles un pulgar.

Todo el camino se la había pasado en silencio, mirando el camino que se extendía frente a el, en sus bolsillos seguían las tarjetas que esos tipos les habían dado durante el enfrentamiento. Si salían de África y regresaban a la Academia probablemente no podía verles de nuevo.

"Aun tenia preguntas que hacerles, su propuesta no era para nada mala" pensó el sudafricano, chasqueando su lengua y resoplando con fastidio. Fue fácil identificar cuando llegaron al lugar que les indicaba el mapa, ahí estaban muchos de sus compañeros.

Se estiro suavemente, luego del largo viaje, estaba cansado, sucio, lleno de sangre, sediento y hambriento. Lo único que necesitaba era un buen descanso "¿Aun tendré cosas que aprender en esa escuela?" se pregunto, esperando que algunos de los maestros por fin apareciera para recogerlos o algo así.

Por fin habian arribado a Camerun, la ciudad se veia tercermundista, pero bastante diferente a lo que habian vivido anteriormente. Akela detuvo el coche y todos comensaron a bajar. -Chicos, mantenganse cerca, esto aun no acaba- dijo Ben mientras tomaba su mochila en mano y pasaba las demas a sus dueños.

De pronto muchas caras familiares comenzaron a aparecer de la nada. Parecia que todos aquellos alumnos de crusaders habian vivido una similar aventura en africa. -Asi que no fuimos los unicos...- susurro Ben viendo como muchos de los alumnos se felizitaban unos a los otros por haberlo logrado. "Espero que todos lo logren sin percanses" penso contando el numero de alumnos en el otro grupo.

-Chicos, chicos. Me da mucha alegria que todos allamos logrado llegar a Camerun, seguramente todos estan cansados y agotados, pero esta mision aun no acaba. Si todos llegaron aqui fue por que recibieron las mismas instrucciones que nosotros.- Ben intentaba atraer la atencion de sus compañeros, pero no todos se la otorgaban, aun asi siguio hablando. -"Camerun es la respuesta"- recito Ben, como recordaba la pista en el papel junto con el mapa de africa. -Aun no volvemos a America, debemos encontrar lo que significa, Cameun solo era nuestro destino, debemos encontrar lo que sigue para salir de aqui.-

Ben termino intentando unir al nuevo grupo que ahora estaba muy numeroso y seguramente llamarian mas la atencion.

Abrio sus ojos y lo primero que pudo ver fue la escena perfecta para sus ojos: El rostro de su amado. Esta le dedicó una sonrisa angelical al joven, viendo como este le había extendido la mano. Al tomarla con gentileza escuchó la palabra "Camerún". Su rostro se torno serio, para luego volverse bastante emocionado. Haló fuertemente la mano de Nisheida, halándolo hacia ella para levantarse. No había medido su fuerza y como consecuencia, cuando se levantó de donde estaba, chocó su cabeza con la del pobre rubio, dándose ambos un gran marronazo en la frente.

-¡Aw aw aw aw aw! - Exclamó adolorida frotandose la frente. -¡G-Gomen-ne, Dera-kun! - Subio la mirada apenada para verle a los ojos, haciéndo luego una leve reverencia. Movio su cabeza levemente hacia los lados por el golpe, para luego ponerse en marcha.

Esta vez, la joven había decidido caminar a paso calmo al lado de Nisheida. El silencio del joven le hacía hacerse muchas preguntas, pero decidió dejar las cosas así, tal vez el joven no quería ser molestado, y lo respetaría. Por el momento, Shion se encontraría atenta al camino y a sus compañeros, sobretodo, atenta a Ren, quien ya estaba herido de por si. Finalmente habían llegado a un lugar donde se encontraron con los demás. Vaya, al parecer no eran los unicos en aquel lugar, y tal y como había dicho su Nishi el primer día: Probablemente más jovenes de la academia estuvieran metidos en aquel embrollo.

Miraba atenta a todos y cada uno de los jovenes allí presentes. No conocía a ninguno, o eso creía, hasta que sus ojos se fijaron en dos personas que le habían dado la bienvenida a la academia.

-¡Mi-chaaaaan! ¡Ben-kuuuuuuun! - Exclamó con alegría mientras alzaba su brazo en alto y saludaba con una gran sonrisa a aquellos dos muchachos (Benedict y Mi-Nyu). A pesar de no conocerles a fondo, le daba alegría que estuvieran allí sin ningun tipo de heridas. Después de saludarles volvió su mirada a Ren y le sonrio.

-Lo logramos, Ren-kun... - Ve a Nishi. -...Dera-kun. - Le sonríe a ambos. Puso su mano sobre la cabeza de Ren y le dio unas palmaditas para felicitarlo por su desempeño y esfuerzo. Ha de haber sido un duro viaje, sobretodo los ultimos días. -Espero que tus heridas sanen pronto, nee. Al parecer ya pronto volveremos a casa. - Refiriéndose a la academia. -Espero que vayas a la enfermeria a revisar tus heridas ¿bien? - Le miró en tono de "regaño", pero quería que fuera para que pudieran atenderle aquellas heridas mejor de lo que ella había hecho.

Durante el camino se mantuvo en silencio, mirando desde el espejo al conductor, pasando por el paisaje de la ventana y de vez en cuando, de forma furtiva, a Ian.
Se encogió de hombros manteniendo el silencio. Para cuando llegaron, todos se fueron por su lado. Nathan bajó del jeep mirando a los demás compañeros reunirse en grupos para saludarse.
Observó los perfiles de los edificios, como si fuera la primera vez que pisaba una ciudad. Pero ciertamente, no podía creerse que por fin semejante pesadilla hubiera acabado.
Volteó a ver al rubio que le observaba desde la silla de conductor.
-...Muchas gracias Stefan -Agradeció afirmando con su cabeza.- No tengo nada para ofrecerle con qué agradecérselo, pero...
Le miró fijo unos instantes.
-Le deseo lo mejor. Tenga mucho cuidado.

Observó como el vehículo se alejaba por la carretera, siguiéndolo con la mirada hasta perderlo de vista. Fue cuando escuchó a uno de los compañeros hablar.
Entre todo el caos, un peligris trataba de captar la atención de todos. Ladeó la cabeza. Tenía un nombre sencillo, pero en aquél momento no lo recordaba.
Algo un tanto religioso.
"Isaías... Judas... Benedict" Concluyó, parpadeando varias veces prestando atencion a sus palabras.
Se giró hacia este, puesto que había captado completamente su atención.
-¿Cómo? ¿¿Quieres decir que aún hay algo más?? -Exclamó sorprendido.
Suspiró con algo de desánimo. No estaba muy enérgico para actuar. Se moría de ganas de volver a America mínimo, cambiarse de ropa, ducharse, sanarse las heridas, comer algo aunque fuera una bandeja insípida precocinada de la cafetería.
Llegó hasta su lado, a una distancia prudente, y se puso a observar a alrededor.
¿Qué debían encontrar?

Evento oficialmente cerrado. Se darán bonuses de experiencia a los chicos que participaron en el en todo el transcurso del día.

Equipo 1
Derek = 180
Mi Nyu= 75
Dylan = 180
Nika = 150
Terry = 100
Seth = 120
Adam = 10
Madoka= 10

Equipo 2

Benedict = 180
Mark = 110
Swithin = 180
Jake = 150
Aydan = 120
Alina = 150
Daigo = 10
Clow = 10
Equipo 3 (Falta de terminar puntuaciones)