Intentando ser uno (Libre)

Aun faltaba un tiempo para que comenzaran las clases, o eso es lo que suponía porque aun no lanzaban la noticia de que ya estuvieran por comenzar. Por ello es que pensó en que el momento de entrenar un poco y ver cómo estaban sus capacidades luego de vacaciones. Se puso una ropa deportiva, no queriendo usar la de la escuela aun y se encamino al campo de entrenamiento.

Cuando llego no se le hizo nada raro el ver que la población era de 0 jóvenes. Como pensó antes no era raro, pues debían de querer ponerse al día con sus amigos y conocidos, o perderse en el nuevo colegio que pisaban. Suspiro un poco pasándose la mano por la cabeza, para después apretarse los guantes sin dedos.

”Bien Max. Es hora de que comencemos.” Su voz interna rio un poco ante su entusiasmo.

”Te doy 8 por entusiasmo, pero un 3% de posibilidades en que lo cumplas.” Oficialmente eso no le gusto para nada a Terry, el cual perdió la posición en la que se encontraba. ”Max eres un bastardo, solo haz lo que te digo si no me amarro en las noches y a ver cómo te escapas.” Un frustrado –ya que- resonó en su cabeza. Cerró los ojos concentrándose con fuerza, esperando a que su otro yo le ayudara pasándole un poco de su poder. Abrió los ojos de nuevo, mirando el saco de boxeo delante de él y sin dudarlo comenzó a golpearlo.
Pero la decepción fue lo primero que vino a el cuándo se dio cuenta que no estaba haciéndolo con fuerza sobrenatural. No habían avances aun de que sus mentes fueran una.

Spoiler:

- la, la ,la– caminaba tarareando una joven de no muy alta estatura y de esbelto cuerpo, caminaba lenta y pausadamente mirando a su alrededor buscando con la mirada algo interesante que hacer, dejo articular palabra, cerro sus labios pero sin detener su andar estaba aburrida y eso era algo que no lograba tolerar, había estado caminado por unos 20 minutos. Sus grandes orbes verdes se entrecerraron sin apartar la vista del frente, estaba…aburrida, caería en la locura si no lograba encontrar algo que realmente captara su atención, se detuvo súbitamente después de mirar una de sus manos – que tonta – comento dándose un golpecito en la cabeza con la palma de su mano, camino con mas rapidez hasta que se vio frente al campo de entrenamiento una vez estuvo frente a este entro en el terreno habían bastantes jóvenes allí hablando y riendo entre ellos, era algo de lo cual Louise no podía disfrutar pero ¿Por qué? Simple, no tenia un amigo a quien saludar o con quien hablar, estaba sola como…otra vez.. Sus labios se abrieron dejando escapar un leve suspiro “ bueno…a lo que vine “ pensó caminando entre la multitud esquivando personas y procurando no chocar con ninguna de ellas una vez se aparto de todo y de todos decidió comenzar, estiro su brazo hacia el frente con la palma de la mano completamente abierta y luego cerro los ojos, mientras pensaba en lo calido y reconfortante que el fuego podía ser, no paso mucho para que una pequeña llama comenzara a formarse en su palma derecha, primero abrió un ojo y luego el otro – ¡lo logre¡ - comento emocionada dando saltos pero, su entusiasmo no duro mucho pues la pequeña llama paso de ser una pequeña flama a ser una gran llamarada, lo que hizo que Louise apartase su mano bruscamente cayendo al suelo y por consiguiente apagando el fuego – soy una torpe…torpe…torpe…- murmuraba para si misma decepcionada por lo que acababa de pasar, mirando hacia ambos lados percatándose de que nadie la hubiese visto.

Después de un rato de aguantar los sermones de Max –Sobre todo pidiéndole salir, que el entrenaría y tal.- decidió tomar un ligero descanso. El tener la mente compartida con un ser completamente diferente a él cansaba como no había idea. Lo bueno que los constantes dolores de cabeza habían disminuido, así como su control de cambio con él.

Pero le faltaba aun más. En lo que llevaba ahí estudiando logro muchas cosas de control, pero la mas importante era la que le faltaba. No quería depender por completo del cambiar de posición con Max para poder pelear, quería hacerlo el mismo. Pero cada que estaba más cerca era cuando mas fallaba, puesto que no se podía combinar con su alter ego con tanta facilidad.

Fue entonces que llego a escuchar la voz de una chica cercana a él. No pensó en hacerle caso - contrario a lo que decía su otro yo sobre su apariencia-, no hasta que las llamas se hicieron muy cercanas. El calor intenso le hizo dar un salto para atrás como si se pusiera en pose de defensa, pero rápido se dio cuenta de que solo era una chica sin poder controlar su poder. ¿ A quien le recordaba?
Con cuidado se acerco cuando las llamas bajaron.

“No te preocupes, nunca sale en el primer intento. Ni siquiera en el decimo.”

Estaba, enfada consigo misma por no poder lograr nada por cada vez que lo intentaba paresia empeorar, apretó los puños con fuerza mientras mantenía la cabeza gacha, el ceño fruncido y aquellas grandes orbes verdes que cautivaban se mantenía fijos al suelo – tal vez, si lo intento de nuevo…solo tal vez lo logre – se repetía una y otra vez, sin querer darse por vencida, aunque no le agradaba en lo absoluto fallar Louise no era el tipo de personas que se rendía ante cualquier obstáculo que se le presentase, al contrario ella lo veía como un reto que debía superar cosa que le daba el entusiasmo y las ganas de seguir adelante sin querer rendirse.
Suspiro con aire de resignación aunque fuese persistente y no quisiera rendirse, el poco entusiasmo que aun le quedaba comenzaba a extinguirse casi tan rápido como la flama en su mano lo había echo no hacia poco antes, decidió levantarse para volver a intentar y mientras lo hacia escucho una voz masculina, se dio vuelta y se encontró con un joven alto de cabello oscuro – gracias…espero lograrlo pronto – comento sonriendo ampliamente ladeando la cabeza, era la primera persona con la que cruzaba palabra desde que había ingresado a la academia, miro directamente al rostro del chico y luego bajo hasta sus pies, lo miro de arriba abajo sin dejar que ningún detalle se le escapase, ¿estaría en su mismo curso? Fue una de las muchas preguntas que llegaron a su cabeza – esto…mucho gusto mi nombre es Louise Hitashi – se presento estirando el brazo esperando a que el contrario le correspondiera con el saludo.

Por unos segundos juraba que se sintió observado. No, solo era su sarcasmo interno el que hablaba, porque realmente lo observo con un afín cuando lo miro que el más penoso terminaría sonrojado por ello. Gracias a lo mas profundo, el había perdido por lo menos un poco de la vergüenza.

“Ya verás que si, solo se necesita mucho empeño y ya” Comento al ver las expresiones de la jovencita desde antes. Sonrió de manera caballerosa y fue que observo la mano delante de el. “Oh si cierto.” Extendió la suya. “Mi nombre es Terry Maxwell, mucho gusto” Le dijo.

Internamente Max no dejaba de hablar sobre las proporciones de aquellos senos, diciendo el diámetro, la distancia entre los pezones y claro, comentando sobre lo pesados y la talla del bra que usaría. Se paso una mano por la cara, dándole un golpe mental a su “conciencia”, mandando muy lejos los comentarios que le dijera al respecto.