Who's first? - Class

Clary tuvo suficiente de verlos juguetear entre sí mientras se preguntaban por sus cosas, sus días o se presentaban los alumnos nuevos con los regulares. La chica no pudo evitar sonreír y apenarse por lo que les iba a hacer. Bajó sus piernas del escritorio y se pudo de pie haciendo repiquetear sus tacones en un acto de presencia. Sonrió ante todos y después apuntó a su pizarrón electrónico para mostrar su nombre “Clarissa Elizabeth Mathews”

—Hola chicos, como sé que todos saben leer, pueden ver en el blackboard mi nombre… pero por todos los cielos no me llamen así —el nombre de su pizarrón se tachó y apareció su sobrenombre— simplemente llámenme Clary —sonrió y después se puso seria mientras caminaba en círculos frente el pizarrón electrónico— Yo estuve en el ejercito de los Estados Unidos de América y fui una orgullosa combatiente tanto en campo de batalla como en sala de control. Para quienes no lo sepan… soy una técnopata —alzó el rostro orgullosa y después siguió hablando con una voz autoritaria— Está clase es importante ya que se verán en situaciones en donde sus poderes no les servirán para todo. Por ejemplo si tu poder es… —se llevó un dedo a los labios, dudativa— leer mentes, puedes saber que el tipo frente a ti quiere matarte, pero ¿con qué te vas a defender? ¿con qué vas a defender a tu país o a tus amigos? Por eso chicos, les enseñare a controlar armas, equipo y transportes que nos ayuden a facilitarnos el trabajo —sonrió perversamente y chasqueó los dedos, una especie de mesitas aparecieron por debajo del suelo, haciendo que los alumnos se abrieran un poco. Cada una de las mesitas tenía una glock modelo 25, calibre de .380 milímetros. Clary se sacó una igual de su chaleco y la cargó— Bien, basta de tanto bla, bla, bla y pongámonos en acción. Quizás lo que les vaya a decir suene muy cruel pero es cierto, a mí no me sirve gente sin agallas o valor, si no están dispuestos a luchar y a morir por su misión o sus ideales… para mí no son más que basura, así que he decidido hacer una limpia —la chica sonrió y la puerta del “aula” se cerró— Esa puerta no se abrirá hasta que termine esta clase y solo saldrán de aquí… la mitad de ustedes —se quedó en silencio para ver la reacción de los chicos y sonrió de nuevo con malicia— Soy conocida como Royal Pain… y ese título lo tengo por algo niños. Así que créanme que es en serio cuando les digo esto, van a estar en parejas —tomó a su R2 y checó los nombres de los alumnos— cada pareja que mencione, quiero que se pongan una delante de la otra a un metro de la mesita, quiero que corran por el arma… y maten a su compañero, así de fácil —Clary sonrió y con su glock apuntó a una especie de tiro al blanco —que tenía en la esquina a su lado derecho— y disparó. El disparo hizo eco por toda el aula y vio como varios de los chicos brincaban asustados— si uno de los dos chicos en pareja no dispara… bueno, me veré en la pena de matarles a los dos… —la maestra se recargó en la pared, levantó la vista de su R2 y vio los ojos sorprendidos de varios alumnos— Les doy 5 minutos para que lo hagan. Estos son los equipos:

Alessandro con Derek
Kuja con Helena
Damian con Sora
Katia con Cassie
Ariel con Mi Nyu
Aydan con Umiko
Jezabel con Mark
Scarlett con Ethan
Ian con Gerard
Jace con Claire
Dylan con Rai
Alina con Terry
Jake con Blake

Cerró a R2 de golpe y vio a los chicos con ojos entrecerrados.

—Su prueba de valor empieza… ¡Ya! —Clary se cruza de brazos y de repente frunce el ceño cuando escucha que alguien toca en la puerta de metal. Abre a R2 y por las cámaras que tiene fuera del mini bunker ve que un alumno tardío estaba parado delante de la puerta —¡Vaya! Tenemos a alguien que llegó tarde —aplasta un botón en R2, se abre la puerta de repente, entra el chico y se cierra de golpe— Ya nadie más sale ni entra de aquí —dice la maestra. Va a su escritorio, abre un cajón y saca otra pistola para lanzársela al recién llegado — Tú, esto es cuestión de vida o muerte. Dispárame o si no te disparo yo —la pelimorada apunta al chico recién llegado.

(Nadie puede postear por el momento… sólo el alumno tardío que permití entrar a la clase. Después vienen las instrucciones.)

Ben corria por los pasillos acomodandose su camiseta deportiva la cual estaba cubierta de cesped y hojas secas. Habia pasado la mañana entrenando en los jardines olvidando por completo la clase de Combate con Armas y Tecnologia.

"Rayos! me prometi a mi mismo no faltar a esta clase" Ben arribo a la gran puerta futurista la cual tenia pinta de ser gemela a la gran puerta estilo bobeda de la Zona Warning. Ben pauso unos segundos y se pregunto como diablos accionar la gran puerta, ya que esta no tenia un picaporte como una puerta normal. Al no ocurrirsele algo mejor simplemente llamo a la puerta con unos breves golpes con su puño cerrado.

-Disculpe, puedo pasar?- La puerta liberó presión y un ruidoso estruendo indicó que habia comenzado su mecanismo de apertura. Al abrirse lo suficiente Ben asomo su cabeza para darse cuenta que todos sus compañeros ya se encontraban dentro, estaban formandose en parejas frente a lo que a simple vista parecia un arma de fuego."Valla, va es en serio lo de combate con armas." pensó Ben y comenzó a ingresar en el aula que mas bien parecia un laboratorio sacado de un juego de video. Ben se presento ante la nueva docente.

-Disculpe mi tardanza, estuve entrenando en los jardines y perdi la nocion del tiempo. No volvera a pasar, mi nombre es Benedict Rensey, mi habilidad especial es la Umbrakinesis fisica,- hizo una reverencia y se alzó tras unos segundos. Hecho un vistazo alrededor y noto como era la unica persona sin pareja.

-Disculpe, parece que yo no tengo...- las palabras de Ben fueron interrumpidas por la maestra quien saco un arma de su escritorio y se la lanzo. Ben la tomo un poco descuidadamente ya que las armas de fuego no eran de su agrado y escucho a la maestra. La maestra le encomendo matarle asi como asi, Ben se paralizo y solo pudo repetir las palabras de la docente en su cabeza.

-Tú, esto es cuestión de vida o muerte. Dispárame o si no te disparo yo—
-Vida o muerte!- -Disparame!- -Disparo yo!-
-Vida!- -Muerte!-
-Yo... yo, no puedo hacerlo...- Ben comenzo a temblar. Tenia varios meses entrenando para hacerce mas fuerte, pero no para asesinar. Prometio protejer a todos los que lo merecieran, pero no de esa manera. Matar o morir, era el dilema planteado por la docente.

"Eso es!" Ben entendio el concepto de la clase, era exactamente lo que habia vivido en Africa, matar o morir. Ben empuño el arma y apunto directo a la docente.

-Estoy listo-

—Lo siento Benedict… muy lento —musita Clary mientras aprieta el gatillo y le dispara justo en el pecho al muchacho de cabello oscuro. —Debemos ser más decididos en nuestras acciones, un momento de duda, significa la muerte en batalla—recita y mientras ve claramente como el chico se lleva las manos al pecho con rostro incrédulo, sus ojos se salieron de sus cuencas y después lo vio desvanecer para darse de bruces contra el suelo. Como cualquier muerto… en cualquier campo de batalla.

—Bien, ahora que ven que esto no es un juego… más les vale que empiecen. No quiero que se acerquen al cadáver —ordenó con voz ronca— Los que sobrevivan se encargaran de los cuerpos. Bienvenidos a la vida real niños… esto es guerra.

Royal Pain se cruzó de brazos y esperó atenta y con muchas expectativas mientras su corazón bombeaba con fuerza y con un sentimiento de culpa.

(Instrucciones en spoiler)

Spoiler:

Mi Nyu se quedó en completo shock. La maestra no podía estar hablando en serio… debía de estarlos probando, la sur coreana se acomodó delante de Ariel y sus piernas empezaron a temblar ¿En verdad tenía que dispararle a Ariel? “No, jamás le dispararía a él… jamás le dispararía a ese ángel. Esto es solo una broma… una terrible broma” Mi Nyu respiró agitadamente y empeoró cuando vio entrar a su primer amigo en Crusaders: Benedict Rensey.

—Ben… —susurró pero se quedó en shock cuando vio como la maestra le disparó al chico y calló al piso. La chica se llevó las manos a la boca intentando ahogar un grito que aun así se escapó por sus labios. ¿Y si Ben aún respiraba? ¿Y si aún seguía con vida? Mi Nyu podía curarle, iba a ir en dirección a Ben, pero se detuvo cuando escuchó a la maestra. Miró a Ariel con los ojos llenos de lágrimas… si no hacía algo… Ariel podía morir. Tenía que hacer algo… y sabía exactamente que sería. La surcoreana corrió por el arma intentado alcanzarla antes que el pelinegro del frente.

(Dado en zona spam = 1 XDDD)

La coreana quiso correr con todas sus fuerzas pero, con el susto, el impacto de ver a Ben y las lágrimas en sus ojos se tropezó con sus propios pies y se fue de bruces contra el suelo. Cuando la coreana calló se pegó fuertemente en la cabeza e inclusive pudo ver su sangre. Ella sabía que Ariel no la dañaría… el mismo le había prometido protegerla, por lo que Nyu lloró con más fuerza. Su plan de suicidio no sirvió de nada porque era demasiado torpe y estúpida. Desde el suelo vio a Ariel con los ojos hinchados y estiró levemente la mano.

—Te lo ruego… mátame. No podría soportar que te murieras, por favor, mátame.

Jace se removió en su lugar un momento y frunció el ceño. Las cosas se estaban tornando un poco extrañas en ese bunker… los sentimientos de todos le estaban atosigando. La maestra “Clary” daba un discurso que poco le pudo haber importado… hasta la orden de matarse los unos a los otros. El inglés abrió sus ojos como platos y se quedó atónito por un momento. “¿Es en serio? ¿Tengo que quitarle la vida a la tal Claire?” El castaño —que estaba cruzado de brazos—, se miraba confundido y totalmente abrumado… y no sólo por sus sentimientos… si no que todos los sentimientos ajenos estaban a punto de hacerle explotar. Cuando el chico que se presentó como Benedict Rensey, fue asesinado por la profesora… Jace se llevó las manos a los oídos y gritó levemente. Los sentimientos de todo el grupo por el asesinato le envolvieron como si fuesen agua. Vio con ojos de pánico como la chica del cabello rosa iba por la pistola a paso lento, pero Jace no pudo ni siquiera moverse, los sentimientos de angustia estaban mezclados con los suyos y supo que no había nada que hacer. No fue por la pistola y vio como la chica llamada Claire tomó el arma… y supo que era el fin… “a fin de cuentas… no vale la pena vivir” cerró los ojos esperando por el disparo.