Como lo Prometí... (Privado Alina)

Alina se sentía feliz de que a su amigo le haya gustado la película, el chico alabó al actor y tenía razón en todo, Jhonny Depp siempre había sido uno de sus actores favoritos. Se prepararon para salir y se unieron a la fila de gente que aún seguía en movimiento bajando por las escalerillas, una vez estuvieron fuera de la sala Dylan tiró los envases donde correspondía y se separaron quedando en que se volverían a encontrar allí ya que el también debería ir a su toilet correspondiente, de alguna extraña forma así como lo había dicho le había recordado a su padre; no pudo evitar sonreír pensando en eso mientras caminaba hacia el sanitario.
Cuando llegó hizo sus necesidades y luego de lavarse las manos se secó y mirándose al espejo se arregló el cabello, ese día traía una coleta en el medio, dejando escapar por debajo de ella una cantidad considerable de largos cabellos rosados. Luego de quedar conforme con su arreglo salió del lugar y comenzó a caminar por los pasillos, como en las otras salas había funciones los corredores se encontraban vacios y no parecía haber nadie alrededor. Alina caminaba con paso normal hasta que comenzó a sentir que alguien caminaba detrás de ella, el recorrido se le hizo larguísimo y más porque el lugar era grande y los sanitarios estaban bastante alejados. Algo temerosa comenzó a acelerar el paso hasta que una voz fuerte la hizo detenerse de golpe.
-¡Sabía que eras tú!-dijo una voz masculina-
Alina se giró y se dio cuenta de que se trataba del mismo chico de antes, pero no solo eso, observándolo un poco mejor pudo distinguir que era uno de los compañeros de colegio que la molestaban en la primaria, esa primaria en la cual tantas agresiones ella había padecido. Sin decir nada retomó el paso dándole la espalda al sujeto y comenzó a caminar rápidamente, casi corriendo escuchaba como él aumentaba su velocidad. Por alguna razón sus ojos se humedecieron mientras se apresuraba en salir de allí, luego de uno segundos pudo distinguir la figura de su amigo a lo lejos, casi sin pensarlo se acercó a él y sin decir nada se abrazó a su torso escondiendo el rostro en su pecho mientras su cuerpo temblaba levemente, en ese momento ni siquiera pudo pensar en la reacción o en la incomodidad de su amigo; solo pudo apretar sus ojos con fuerza mientras rogaba que aquel sujeto se marchase al ver a Dylan allí.

Spoiler:

El chico había salido del baño después de hacer sus necesidades y también acomodarse un poco el cabello, que como siempre, comenzaba a generar estática, se propuso a esperar a Alina, en la espera fue a comprar algunos dulces a la dulceria del cine, cuando se dio la vuelta con un par de bolsitas de Skittles en sus manos choco con algo que lo rodeo con sus brazos, era Alina que llego abrazándolo fuertemente casi a punto de soltarse a llorar, se sonrojo completamente y se quedo mudo unos momentos, pero noto que la chica tenia algo raro,

-A-Alina, estas bien?- le pregunto acariciando la coronilla de su cabello, su corazón latía fuertemente, y si, era una situación algo incomoda para el, mas porque no sabia porque repentinamente lo estaba abrazando, estaba algo distraído y no miro al chico que venia detrás de ella.

"Dios, que le abra pasado?" pensó esperando la respuesta de la chica,

Se le ocurrió subir la vista, pero no reconoció a alguien que la estuviera molestando, aunque la persona estaba ahí cerca aun mirándola, decidiéndose sobre si atacar o no.

Alina escuchó la voz de Dylan preguntándole si estaba bien mientras acariciaba su cabeza, no sabía que responderle y en ese momento sintió que le daría más vergüenza verlo a la cara después de haberlo abrazado así de repente, apretó con fuerza sus ojos mientras sentía que sus mejillas se llenaban de tibieza rápidamente.
-Estoy bien…-dijo casi en un susurro-… es que… aquel chico, lo conozco…
Sabiendo que no podría mirarlo a los ojos soltó sus manos y comenzó a separarse lentamente desviando la mirada y clavándola en el suelo, mientras sus ojos aún seguían húmedos.
-Discúlpame por favor… yo … no debí hacer eso…
No sabía ni que decir, si el realmente se había molestado cuando ella había tomado su mano, abrazarlo de esa forma solo había podido incomodarlo más. Al levantar un poco la vista y mirar hacia atrás notó que aquella persona seguía ahí. “Es uno solo… si lo enfrento… tal vez me deje en paz…” pensaba mientras su colgante comenzaba a flotar.
-Dylan… discúlpame… por favor…
Sin mirar atrás comenzó a caminar y enseguida notó como aquella persona a seguía, era inevitable lo que sucedería, pero n o quería molestar a su amigo i tampoco involucrarlo en situaciones peligrosas en las que nada tenía que ver.

La miro estaba confundido con lo que a ella le sucedía, le dijo que conocía a aquel chico, pero Dylan no entendía a que se refería, volteo a ver buscando a la persona a la que Alina se refería, luego le pidió disculpas Alina,

-Muy bien... pero explícame que sucede?- pregunto mirando a Alina separarse de el, luego comenzó a caminar hacia la persona que ahí estaba parada, y por fin noto que era un chico que miraba a la chica como si fuera a atacarla, inmediatamente supo que debía hacer, le tomo la mano de la chica antes de que siguiera mas,

-Espera, yo te defenderé, sin necesidad de pelear con poderes- le dijo poniéndose frente a ella quedando de frente al chico - Muy bien quiero que dejes a la chica en paz- le dijo a la persona desconocida que seguía mirándolos.

Spoiler:

Mientras caminaba hacia el sujeto para enfrentarlo y de alguna forma hacerle entender que no quería pleitos sintió como Dylan tomaba su mano deteniendo su paso. “Yo te defenderé” dijo con la voz segura mientras se colocaba delante de ella, Alina no quería eso, no quería que se viera involucrado con gente que ni conocía y que terminara resultando herido por su culpa, no se lo perdonaría jamás.
-No Dylan… no quiero que te lastimen…-aferrándose a su brazo-… por favor vayámonos de aquí rápido.
Alina notó como los dos chicos se miraban de una forma poco amigable y más que nada hostil, el otro parecía traer el diablo en la mirada, si siempre la había atacado no veía razón para que también no hacerlo un par de años después.
-Ohhh ¿traes compañía? ¡Seguramente otro fenómeno como tú!
-No le digas así… -exclamó ella de repente-… ¡él es mi mejor amigo! ¡Y no permitiré que lo insultes!-dijo saliendo de atras del chico-
Alina clavó la mirada en quien estaba frente a ella, sabía que su ataque era más por temor que por cualquier otra cosa, repudio tal vez, a lo diferente, a lo desconocido, pero aún así ella no podía entender y no aprobaba su forma de actuar.
-El pasado atrás se quedó… no veo razón para que sigamos con esto… ya olvídalo y olvídate de que alguna vez me conociste, es lo mejor para todos.
Alina frunció el seño y tomándo la mano de Dylan lo sacó del lugar, caminando rápidamente cerró los ojos mientras volvía a sonrojarse “Lo sé… se que te molesta….” Pensaba mientras caminaba rápidamente, hasta que al fin se detuvo frente a una fuente de la cual emanaban unas brillantes aguas cristalinas.
-Perdóname Dylan… perdóname por todo… -sus ojos se humedecieron-… yo a veces no sé cómo actuar… no tenías porque presenciar eso…
Suspirando largamente se sentó en la orilla de la fuente y comenzó a hacer círculos en el agua con sus dedos, ni siquiera podía verlo al rostro, su corazón latía rápidamente y se sentía avergonzada, aún así intentaba parecer tranquila, pero era bastante consciente de que no lo parecía estar logrando.

Spoiler:

Dylan miraba al chico tenia pensando golpearlo para que dejara de hostigarlos, pero Alina sujeto su brazo intentando detenerlo, escucho que el otro chico lo nombro fenómeno también, y solo volteo a mirarlo fríamente, cuando la chica lo defendió diciendo que era su amiga, la mirada de Dylan cambio, y se quedo serio un momento, luego la pelirosa tomo la mano de Dylan y lo dirigió fuera de ahí, lo mas rápido posible, esta vez el chico no se incomodo, mas que porque lo retiro de la pelea que estaba a punto de darle al otro, se alejo hasta llegar una fuente, le pido disculpas y el chico solo la miro con cierta tristeza aun sin entender que era todo eso, se sentó junto a ella, y la rodeo con sus brazos haciendo que se recargara en su hombro, estaba muy serio como para ruborizarse.

- Todo esta bien ya. ok? no es la mejor manera pelear, tienes razón...- le dijo intentando calmarla - Pero en serio me izo enojar, sin siquiera conocerlo... si vuelve a molestarte no me detendré y lo electrocutare - dijo con cierta rabia, luego se retiro para dejarla de abrazar, dedicándole una sonrisa - Como puede meterse con nosotros los "fenómenos"?- le pregunto burlándose de su pequeño insulto.

Estando a punto de sumirse en sus pensamientos sintió como unos brazos la rodeaban y la llevaban a recargarse en el hombro de Dylan. En ese momento sintió que su corazón comenzó a latir aún más rápido “¿Qué es todo esto?... ¿por qué me siento así?” pensaba confundida con sus sentimientos, permaneció con la cabeza apoyada en el hombro de él mientras un leve asombro aparecía en su rostro, aumentando aún más su sonrojo. Escuchó como Dylan manifestaba que la actitud de aquel sujeto le había molestado y era lógico, no había necesidad de ser tan hostiles, ese comportamiento era algo que ella nunca había sabido entender.
El chico de ojos azules se separó de ella regalándole una linda sonrisa que en cuestión de segundos la contagió provocando que sonriera también mientras se secaba las lágrimas que habían estado obstruyendo levemente su visión.
-Tienes razón, si les teme a los “fenómenos” no debería meterse con ellos, no cuando lo superan en número…-su rostro se enserió de repente-… cuando era pequeña me maltrataban físicamente y me arrojaban todo tipo de cosas por ser así… a tal punto que mis padres decidieron no enviarme más al colegio y ponerme tutores… luego de unos años parece que todo sigue igual.
Se quedó unos segundos pensando en aquella situación, ella realmente deseaba ayudar tanto a los que eran como ella así como a los que no, pero si los que decían llamarse normales se comportaban de esa forma el ayudarlos resultaría imposible y tampoco daría buenos frutos, lo único que lograría tal vez sería aumentar su odio. “No, las cosas no son así… los que actúan de esa manera son pocos….” Pensó para sí misma intentando convencerse de ello.
-Gracias Dylan por tus palabras…-sonrió nuevamente-… por acompañarme, por venir al cine conmigo… y… por ser mi amigo.
Con una suave sonrisa cerró sus ojos para seguirle sonriendo a quién estaba frente a ella, a pesar de todo había sido un lindo día, y el salir con su amigo siempre la llenaba de alegría, fueran a donde fueran.

Se dio cuenta que había hecho por fin sonreír a la chica, eso lo alegro bastante, siguió escuchándola que ella expresaba que el tenia razón ya que ese chico no debería meterse con ellos si tanto les temía, en ese momento se quedo un momento serio,

"Nos teme? es ilógico hostigar algo que te da miedo?" pensó, pero nunca lograba entender a veces a las demás personas por más que lo pensara, pero retiro inmediatamente ese pensamiento hasta que escucho que ella dijo algo al respecto sobre que le arrojaban cosas, su semblante cambio al de uno de “Buscare a ese tipo y lo arrojare a él a otro lado”.

Alina le agradeció por ser su amigo, y el no pudo evitar ruborizarse un poco, pero sonrió sinceramente de nuevo como siempre,
-De nada Alina- le dijo felizmente mientras se quedo un momento mirándola algo serio y sin darse cuenta de lo que hacía, le ayudo delicadamente a quitarse algunas lagrimas que tenia aun sobre la mejilla con el dorso de la mano – Pero prométeme que ya no lloraras frente a mí, es algo que realmente me afecta- le dijo sinceramente, y repentinamente se ruborizo un poco, pues ya se había dado cuenta del ambiente que había creado.

Dylan se quedó unos segundos mirándola fijamente, lo que provocó que su sonrisa desapareciera poco a poco para que su atención se centrara en los ojos azules de quién estaba frente a ella. Extendiendo su brazo Dylan limpió las mejillas de Alina quitando algunas lágrimas escurridizas que había escapado de sus ojos, ella no pudo hacer más que sorprenderse con dicha acción, aquella cálida mano rosando suavemente su rostro logró acelerarle el corazón y aumentar sus sonrojo notoriamente, pero no podía dejar de verlo “Quiero saber por qué…”
Dylan le dijo entonces que no llorara frente a él porque eso le afectaba “Debe ser que es muy sensible… por eso…” Casi sin darse cuenta levanto sus manos y las colocó sobre la mano del chico que aun seguía sobre su rostro, sintiendo su calidez cerró los ojos con una leve sonrisa.
-Está bien… perdona por preocuparte… no volverá a suceder, tengo que ser fuerte, lo sé…
Su sonrojo se mantenía y ya no tenía forma de aumentar más aunque se hubiese dado cuenta de lo que había hecho, se puso de pie de golpe y se giro dándole a él la espalda. “No puede ser…” pensaba mientras mordía su labio inferior y apoyaba ambas manos sobre su pecho “¿Por que?… así…” cerró las manos con fuerza intentando distraer su pensamiento, no podía evitar darse cuenta que su corazón latía locamente, se llenó de dudas y de sospechas acerca de ella misma, era demasiado inexperta para entender el porqué de sus reacciones “Es mi mejor amigo…” pensó suspirando largamente. Se giro hacia el chico y sin mirarlo se dispuso a hablarle mientras clavaba su mirada en el agua.
-¿Qué hacemos ahora?-pregunto con una voz suave-
Las aguas cristalinas se movían gentilmente a causa del agua que seguía entrando, las luces se reflejaban en ella provocando que esta se reflejara en los ojos de la pelirrosa agregando un brillo cristalino al que ya se encontraba naturalmente en sus ojos.

Alina lo había mirado fijamente, igualmente el a ella, el no se había percatado de lo sucedido hasta que ella lo tomo de la mano provocando que se ruborizara mas, le pidió disculpas por preocuparlo, y dijo “sé que tengo que ser fuerte” aun seguía ruborizado intensamente, pero ante esas palabras sonrió, se sintió un poco identificado con ella, el siempre se dedicaba a ser fuerte “Tengo que ser fuerte por los demás” fue su lema desde que perdió a su madre, y ese lema siempre lo seguía donde quisiera que se topase, hasta que se volvió parte de él. De repente miro que ella se sonrojo aun mas, poniéndose de pie de golpe, el se quedo ahí mirando su reacción confundió, hasta que ella hablo preguntando que harían ahora pero sin voltearlo a mirar.

El se puso de pie, algo confundido y su rubor había desaparecido por tal confusión, no podía entender que le pasaba a Alina pues de alguna manera también era ingenuo,

-Estas bien? Quieres seguir conmigo a otra parte?- le pregunto ligeramente ruborizado mientras esperaba su respuesta, realmente no quería que este día acabase ya, esperaba que Alina lo acompañara a mas sitios y conocer todos los alrededores de la academia, era interesante puesto que disfrutaba estar con ella.

Aún con la mirada clavada en el agua escuchó como Dylan le preguntaba si se encontraba bien, ella lo sabía, había estado actuando extraño, pero ni siquiera ella misma entendía la razón de su comportamiento. Subiendo la mirada lentamente se topó con los ojos azules del chico y se perdió en ellos por uno segundos hasta que finalmente sonrió de forma dulce para que él dejara de preocuparse.
-Estoy bien… no te preocupes…-bajando un poco la cabeza pero aun mirando a Dylan-… claro que me gustaría ir a otra parte, si te parece podemos caminar por aquí y si encontramos algo de interés nos detenemos… también me gustaría conocer un poco más esta ciudad tan linda…-se rasco al mejilla-… aunque naturalmente no podremos hacer todo en un día…
De pronto una sonrisa amplia se dibujo en su rostro, le gustaba la idea de pasar el día paseando con Dylan, le gustaba su compañía, a pesar de que a veces tuviera esas reacciones de las que ella misma se extrañaba, aún así le gustaba estar con él.
-¿A dónde te gustaría ir?… creo que ahora te toca a ti elegir.
Con una sabe sonrisa en sus labios se quedó esperando la respuesta de su amigo mientras estudiaba el color de sus ojos, sin saber porque sentía que podrían mirarse mutuamente por mucho tiempo sin desviar la mirada, naturalmente se extrañaba de esto, ya que su timidez no le permitía aguantar una mirada directa por mucho tiempo, pero con Dylan esto parecía estar cambiando “Porque somos amigos…” pensó mientras su sonrisa se hacía más grande.

Dylan esperaba la respuesta de la chica, hasta que Alina comenzó a hablar, inmediatamente se ruborizo y se quedo algo quieto cuando ella comenzó a mirarlo fijamente a los ojos, no había notado que antes no podía mirarlo a los ojos, y ahora lo hacía muy seguido, era como si desde ese momento sintiera confianza total en Dylan, aunque solo fueron unos segundos, luego sonrió algo tímido respondiendo a su sonrisa, la siguió escuchando y le dio gusto que quisiera pasear con el aun, hasta que le pregunto que a donde le gustaría ir a él, pues era su turno de elegir,

-Pues... ahm... -se llevo una mano a la barbilla pensando mirando a todos lados haber si encontraba algún lugar al cual le interesase ir, le gustaba mucho los videojuegos, pero recordó el pequeño último incidente de hace unos dos años donde descompuso una maquina, no era bueno manteniendo sus aparatos en buen estado,

-Bueno, me gustaría comprar cosas antes de ir a la escuela de nuevo- contesta feliz y le toma la mano, estaba aprovechando esa oportunidad, esta vez consciente de que en verdad quería tomar su mano - Vamos primero a comprarme un ipod!, mi padre me había dado dinero hace tiempo para comprarme uno por mi cumpleaños, pero no había tenido oportunidad por el viaje que hice hasta acá- dijo alegremente caminando junto a Alina, mientras la dirigía en busca de una tienda.

Dylan dijo que le gustaría comprar algunas cosas antes de regresar a la academia, mientras sonreía ampliamente tomó la mano de ella provocándole un leve sonrojo y que una dulce sonrisa se dibujara en su rostro. Comenzaron a caminar y entonces el chico de ojos azules le explico a ella que quería comprar un i-pod, que hacía tiempo quería uno pero no había podido hacer la compra debido al viaje a la academia. En ese momento Alina pensó en que tal vez podría conseguirse uno ella también, amaba la música y siempre estaba cantando cuando hacía algunas cosas o cuando estaba sola, un aparatito para escuchar la música que tanto le agradaba podía resultar ser una muy buena adquisición, ya extrañaba el escuchar aquellas dulces melodías.
-La música es tan bella…-dijo casi en un susurro-... siempre me acompaña.
Siendo guiada por su amigo caminó detrás de él mientras la llevaba por los largos pasillos del centro comercial buscando la tienda correspondiente. Sin saber porque se sentía alegre, una extraña calidez parecía invadir su alma y sentía ganas de sonreír ampliamente, aquella extraña pero hermosa sensación era fácil de identificar en la apertura de sus labios y en el brillo intenso de sus ojos, que parecían estar más iluminados de lo que lo estaban normalmente.

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