Dar cera, pulir cera... [1ª Clase, post grupal]

Ya hacía tiempo que no pisaba una de las aulas, pero el poco tiempo que estaría allí no sería desaprovechado.
Esperando a sus alumnos Lion paseaba por la clase, decidió que esperaría unos seis minutos teniendo en cuenta que era el primer día después de unas largas vacaciones, era hora de que se comenzaran a entrenar.

Cuando todos (o la mayoría) llagaron les comenzó a hablar de lo que harían a lo largo de sus clases.
- Bien mis queridos alumnos, primero que nada debo felicitaros por vuestra actuación en el incendio, aunque... -carraspeó un poco cambiando su suave sonrisa por una más siniestra- Debo deciros que no me gustó nada que la mayoría fueráis directos o a la enfermería o a vuestras habitaciones, porque eso demuestra que tenéis poco control y mucha menos resistencia sobre vuestros poderes, así que... -tomando un libro se dirigió hacia la puerta- Vamos a practicar un poco ese desgaste, sino me dejaréis mal ante el resto de profesorado.

Dicho esto hizo un gesto para que los que estaban sentados le siguieran hacia los campos de entrenamiento, si se ponía a hacerles usar sus poderes dentro del aula seguramente la directora Emelyn se le echaría encima, así que encontrando de paso a algunos rezagados los guió a todos hacia un campo de los más amplios y varios para distintos tipos de poder.

Ya habiendo llegado continuó con su charla.
- Bueno, ahora os pondréis en fila de a uno y vendréis a atacarme con todas vuestras fuerzas, no os procupéis por el daño que me podáis hacer, soy inmune, ¡jajaja! -se reía inecesariamente el peligris- ¿Quién se anima?
Y así comenzó su primer día de clases...

El despertador sonó irritante, taladrando más allá de sus tímpanos para hacerle temblar la materia gris. Seth crujió sus dientes, abriendo sus ojos de golpe con un gesto molesto.
-¡¡Cállate la puta boca!! -Con el puño cerrado, golpeó de tal forma el artilugio que este voló en diferentes pedazos, así como había dejado unas marcas no muy lindas en la mesa.
Destensado, bufó mirando el destrozo para luego mirar a su alrededor. Su compañero ya no estaba, cosa que no le importaba en absoluto: Aunque hubiera estado presente, hubiera gritado igual. Estiró sus brazos mientras arqueaba su espalda, moviendo sus dedos con tal de hacerlos crujir.
No tardó mucho en preguntarse qué hora era.
Hoy era el primer día de clases, debía ser puntual. ¿Y si llegaba tarde?
"¿Y si llego tarde qué? ¡Bah!" Se dijo a sí mismo. No iba a ponerse nervioso por semejante estupidez. Si llegaba fuera de hora, pues fuera de hora, como si se quería saltar la clase.
Con calma, se aseó para luego vestir a regañadientes el uniforme, dejando de lado la chaqueta y arremangandose la camisa. Miró unos instantes la corbata antes de tirarla de lado y se colocó su parche.
-...Que bueno estoy -Siseó ante el espejo con su sonrisa característica y, tal como ya se veía perfecto, salió silvando de la habitación.

Evidentemente, llegaba tarde. Seguramente todos ya estarían en sus aulas, en aquella clase... ¿De qué era? Poco le importaba, sólo tenía en cabeza que era la de aquél tal Lion.
Lion, Lion... ¿Cómo un tío podía tener un nombre tan afeminado? No le caía mal, pero tampoco le tragaba. Como nada de aquella escuela.
"Bueno, la dire..." Deambuló en su cabeza mirando al techo, mientras la melodía que silvaba, una bastante actual y de moda, le distraía. Hasta que topó, girando la esquina, con el profesor y los demás alumnos. Seth se encogió de hombros.
-Buenas -Saludó como si nada, sin importarle horario o tono- ¿Salimos fuera?

Y al parecer, sí, aquella clase se hacía fuera. Chascó la lengua con las manos en sus bolsillos. Parecía que Lion los acusara de desentrenados...
Internamente, Seth se carcajeó alzando una ceja, así como su barbilla mientras sus dientes asomaban en una sonrisa socarrona.
"Esos. Esos son débiles" Pensó con orgullo "Que pasadas las doce se toman su lechecita caliente y se meten en la cama temerosos... Oh, miradme, si me ven fuera me castigarán... ¡¡Absurdo!!"
Estaba casi seguro que pocos sabían como escapar de su habitación al jardín sin tener que cruzar los pasillos. Recordó las escapadas, algunas breves, a Pieceville: Un pequeño momento de placer, con el gusano revolverse en su estómago. ¿Y si le seguían? ¿Y si le encontraban? Oh, ¿Y si él encontraba ladrones, o unos infelices pandilleros que se creían dueños del barrio? ...¿Y si le amenazaban con rajarlo? Ah... Notaba la sangre hervir en sus nudillos... Y las carcajadas de ser devuelto a rastras al instituto, sabiendose triunfal...

-...Me muero de ganas de asestarle un golpe, profe -Murmuró.

Ese día casi se quedaba dormido, casi, pero afortunadamente la alarma de su celular sonó y le hizo compañía al despertador. Se levanto de la cama, golpeándose con todas las cosas tiradas que tenían, maldiciendo en voz alta, estaba mas dormido que despierto por lo cual lo primero que hizo fue darse una ducha fría, cepillo sus dientes y su cabellos para luego ponerse el uniforme.

Se tomo su tiempo para comer su leche fría con chocolate y unas donas, no iba a irse sin desayunar, apenas termino, tomo sus cosas saliendo de la habitación, casi corriendo y por suerte llego segundos que el maestro.

-Inmunidad...-susurro, asombrado, el no sabia mucho sobre los poderes de los demás pero seguramente tener el poder de ser inmune debía ser muy ventajoso, cuando el profesor pidió voluntarios, se escondió entre los demás alumnos, la fuerza física no era su fuerte y le da un poco de miedo usar sus poderes aunque fuera contra un profesor inmune.

Aquella mañana se había levantado mucho antes de lo que pensaba, bajo la fría agua matutina se duchaba a la espera de que llegara la hora de la clase de Resistencia, una asignatura que siempre se le resistía, pues estaba demostrado que el cansancio mental era mucho más notorio que el físico por mucho que dijeran lo contrario. Siempre pensó que teniendo el poder que tenía esa asignatura no le hacía gran cosa, pues ella ya tenía diversas formas de resistir los pensamientos como el hecho de ignorarlos o directamente no estar allí. [...]

Bajó al aula correspondiente que esta vez fácilmente encontró y se sentó en uno de los pupitres junto a la ventana, le agradaba tener siempre esas vistas independientemente de cuán delante estuviera, eso no le molestaba porque de igual modo sabría qué hablan o dejan de hablar de ella.
Cuando el profesor entró se sorprendió de su comentario, estaba diciendo que habían sido buenos pero no lo suficiente debido al hecho de que muchos acabaron inconscientes; Dellaila se ruborizó un poco y se encongió, estaba claro que ella era uno de esos alumnos.

Entonces Lion les guió hacia los terrenos de entrenamiento para probar sus habilidades, lo curioso es que dijo que éstas recayeran sobre él, ¿acaso estaba loco?
La rubia intentó leer la mente de su mayor, algo debía de ocultar para ser tan imprudente, dijo que era inmune pero... ¿Hasta cuánto resistiría?
- Piensa... en nada.... -murmuró. Se quedó extrañada por aquello, normalmente cuando uno se expone como carnada suele tener planes que le ayuden a salir airoso de la situación.

El primero en aceptar ese peculiar desafío fue Deragae Nisheida, a quien ayudó en el incidente y de quien desconocía su poder. Éste se dirigió corriendo a toda prisa hacia el profesor, su rostro reflejaba una auténtica convicción en lo que hacía.
Tras de sí escuchó una voz, Seth Raven, el cual era poseedor de una fuerza increíble también se moría de ganas por golpear al profesor, ¿qué tanto odio se puede ganar un docente solo por su profesión?

-Ah, mierda, hacía mucho que no me pasaba, ya decía yo, ya decía yo...
Hacía mucho tiempo que no llegaba tarde a una clase, pero ese día ocurrió. Se visitó mas o menos rápido y observó que su compañero ya se había ido. Se maldijo a si mismo por no escuchar absolutamente nada cuando está dormido.
Llegó a la clase y los alumnos se estaban poniendo en fila, así que el hizo lo mismo, y de la manera mas sigilosa posible se situó al final de la fila. Había que atacar al profesor inmune... ¿Qué podría hacer? ¿Cómo podría alterarle? Tantas ideas aparecieron en su mente que no pudo evitar sonreir de una manera algo malvada.
Se cruzó de brazos y observó a todo el mundo. Había un ambiente especial, todos parecían nerviosos, o eso creía él. Como sabía que iba a tardar un poco en que llegase su turno, se dedicó a observar nada en especial mientras tarareaba una canción. Estas clases se le hacían algo pesadas, porque era estar de pie un buen rato para luego actuar durante apenas unos segundos, que si tenías suerte se hacían minutos.
Comenzó a limpiar sus gafas cuando un chico se ofreció voluntario para ser el primero. No pudo evitar mirar lleno de curiosidad ¿Cómo evaluaría los ataques si no le puede afectar ninguno y no sabe su potencia? Bueno, ¿Qué mas daba? En el fondo tampoco le importaba demasiado mientras tuviese una nota...

"Inmune?" se pregunto Benedict. "Acaso sera tan poderoso como para poder soportar los diferentes poderes de todos aqui? oh solo esta alardeando."

Benedict se cruzo de brazos consternado y se escondio bajo la sombra de un arbol que estaba en las cercanias. Un chico permanecia sentado junto al tronco del arbol, asi que precuro no estorbarle con su precencia.

La emocion hacia que le latiera mas fuerte el corazon. Por fin podria ver a mas personas con poderes. Una sonrisa adornaba su boba cara.

-Almenos sera mas emocionante que literatura, no lo crees?- Le comento al chico que estaba cerca de el con la mirada fija en el chico que se ofrecio para la demostracion.

Con algunos malestares aún restantes de lo ocurrido en el bosque, se levanta de su cama, para alistarse a la siguiente clase, pero nota que su compañero de habitación había partido. -"Hoy sera un día dificil, ya empezare llegando tarde"-.

Se apresura como puede y al llegar al salón nota que no existe ni una sola alma, solamente encuentra un gran escrito en la pizarra: "Campos de entrenamiento", consternado se dirige a la nueva localidad.

Al acercarse distingue una gran cantidad de alumnos intentando hacer uso de sus habilidades, pero todas dirigidas hacia el profesor...-"¿Sera acaso esta la clase, todos contra el maestro?"-, para tratar de comprender mas la situación se queda recargado en un árbol pensativo.

En eso llega un nuevo alumno a tomar la sombra del arbol y le comenta algo a lo cual le responde: -Si creo que se ve mas interesante, pero, ¿cual es el punto?, solo veo como todos intentan atacar al profesor.-

Se queda consternado, -"¿Tendré que atacarlo yo también?, aun no tengo conciencia de lo que es capaz mi habilidad...

Aydan entro a la clase un poco tarde, le dio gusto escuchar que saldrian afuera al patio, donde tanto le gustaba estar, rodeada de arboles y aire fresco.

"El tema es atacarlo? No importa si es inmune... yo no podria atacar a nadie que no se lo merezca... a menos que me hagan enojar supongo" penso al escuchar lo que el maestro les habia pedido hacer.

Fue y se detubo a lado de su compañero escuchando lo que le decia al arbol.

"Porque le habla? Los arboles no entienden nada humano, que raro? ese arbol se esta portando raro, como si tubiera miedo" Medito un poco, pero intento ignorarlo para averiguar que pasaba,

- No te interesa atacar al maestro Derek?- Le pregunta algo confundida.

Fue de los pocos alumnos que no se puso a hacer fila "Esta loco si cree que lo voy a atacar...no puedo hacerlo" pensaba mientras apretaba con fuerza sus puños, seguramente el maestro era alguien muy fuerte pero no se fiaba de sus propias habilidades.

-...Que estupidez -se alejo de los demás y se recargo sobre un árbol lejano, apartando la mirada del espectáculo dado por uno de sus compañeros al atacar al maestro.

Un suspiro escapo de sus labios, como le gustaría estar en ese momento en cualquier otro lugar, jugando un partido de soccer en la cancha cercana a su casa.

Habia llegado lo mas rapido que pudo a la clase, pero llego tarde al salon cuando se dio cuenta de que no habia nadie, pronto miro como algunos se marchaban a las afueras de la escuela.

Camino tras algunos que tambien iban tarde, y con curiosidad escucho lo que harian en esta clase.

" Nunca he utilizado mi poder para atacar, sera fuerte?" Penso, mirando como algunos hacian fila para poder atacar al maestro, y otros se alejaban temerosos y otros solo fastidiados.

Aun asi Dylan se animo, he iso fila. Tenia ganas de probar su poder con alguien,

"Tal vez... solo seria estatica para una persona, o solo unos pequeños choques electricos" imaginaba mientras se ponia tras un chico, que no supo identificar, ya que aun no conocia a nadie.

Lion sonreía con complicidad, había conseguido causar entre sus alumnos lo que deseaba, desconcierto.
No se sorprendió cuando uno de ellos vino con ganas hacia él, como profesor sabía los poderes de cada alumno -aunque en ocasiones los confundiese- tenía bien claro que los primeros siempre solían ser los que tenían algún tipo de fuerza mayor.

Cuando el rubio estaba a escasos centímetros de él Lion ni se inmutó, dejó que el golpe le chocara únicamente mostrando un leve movimiento causa de la ley acción-reacción. Sonreía tranquilamente observando al chico, cogió su mano y a modo de llave se la puso en la espalada y reclamó la atención de la clase.

- Como veréis vuestro compañero a sido valiente al enfrentarme primero, pero a causa de ello es el que se expone a sufrir ataques del enemigo -soltó al chico palpando su hombro sin dejar de sonreír- Esto suele provocar que ese primero sea el más afectado, no obstante eso no quiere decir el más inútil, pues es el que antes obtendrá una experiencia contra el enemigo. - Se aclaró la voz y mandó junto al resto del grupo a Nisheida alabando su actuación y esperando al segundo.

- Podéis atacar en grupo si así os sentís más seguros. -dijo viendo a alumnos que se escondían al final del todo sin siquiera formar fila- Os daré una ayuda, me sienta peor lo mental que lo físico.

No es que quisiera ser apalizado por sus alumnos, solo quería que le demostraran hasta que nivel habían llegado en sus vacaciones, pero si no se animaban difícil sería comprobarlo...

Off: Es un profesor raro, disculpad si es confuso algo, mis explicaciones no suelen ser claras al principio.

"Impresionante" Benedict extendio sus brazos los cuales tenia cruzados dada la impresion que le causo ver el ataque de su compañero al profesor Lion. "En verdad es inmune" el profesor parecia no mostrar ningun rasguño.

Emocionado corrio a formarse en la fila tambien, no podia espera a probar algunos trucos sobre el blanco perfecto. Esperaba ansioso su turno, pero definitivamente preferiria atacar solo, ya que no quisiera herir a otro alumno.

Observaba como el maestro detuvo el ataque sin hacer nada, "Es realmente fuerte..." -pensaba la rubia.
A pesar de que según sus palabras ella podía hacerle más daño que otros no quiso acercarse aún, prefería observar antes de hacer movimiento alguno.

En un momento notó que la mente de alguien estaba perturbada, molesta según sus comentarios, buscó con la mirada a aquella persona hasta que la notó con la mano en la frente. Se acercó tranquilamente hacia él, estaba un tanto extrañada.

- Esto... hola... -dijo en un tono muy suave- Parece ser que copiaste mi poder. -sonrió tranquilamente cuando notó como le miraba -a pesar de haber averigüado su poder habiéndolo leído se sorprendió bastante-, entonces se ruborizó y volvió a su expresión tímida de siempre.
Cuando leyó su mente lo comprendió, aquél choque de voces era justo el que ella sintió al principio, se quitó los cascos del cuello y se los ofreció.

- Si los usas será más cómodo, procura tararear el ritmo mentalmente y verás que es mejor... -se dió media vuelta y miró al frente, no estaba acostumbrada a hablar así con nadie, quizá el hecho de haberle visto como ella le animó a ello, aunque no sabía realmente el porqué...

Literalmente se quedo boquiabierto al ver como su maestro ni siquiera se inmutaba después de recibir tremendo golpe, al contrario, le hacia una llave al chico rubio que le había atacado. Se notaba que no era nada indefenso pero aun así no le convencía para atacarlo...simplemente no era su naturaleza andar usando sus habilidades contra las personas.

Carraspeo suavemente, tenia miedo pero no podía seguir huyendo, tenia que usar sus poderes y aprender a no temerles. Tomo aire y aun con deseos de salir huyendo y volarse la clase, se formo en la fila aunque estaba mas ansioso con el resto...¡Que rayos! Estaba mas ansioso que el maestro que era el que iba a recibir los golpes.
-Solo una flama...y ya -se murmuraba a si mismo, convenciéndose de que no iba a hacerle daño por mucho que lo atacara.

Escucha una familiar voz hablarle por la espalda. al voltearse se encuentra con su ya buena amiga cytoquinetica, -Ah hola Aydan, no es que no me interese, solamente que no estoy seguro de como hacerlo, tal vez lo intente-

Mientras observa fijamente a los alumnos formándose para atacar uno a uno al profesor con todo lo que tienen, pensando en tomar un lugar también.

-"Si debería intentarlo, tal vez si pruebo lo mismo que en el bosque.... ¿pero que tal si lo fulmino?.... no creo que pueda, es un maestro después de todo, aparte, tiene el poder de la inmunidad, probablemente no le haga ni cosquillas"-

Luego de la primera clase seguía una en la cual Alina no se tenía demasiada confianza, la clase de resistencia física, ella nunca se había considerado fuerte ni nada por el estilo pero era una clase que debía tomar de todas formas. En ello pensaba mientras divagaba perdida por los pasillos “¿Por qué me cuesta tanto encontrar las aulas?... en realidad no tuve tiempo de recorrer el lugar antes del inicio de clases…”. Mientras un suspiro de resignación salía de su boca continuaba en busca del aula hasta que luego de unos minutos que se le hicieron eternos logró dar con ella. Su sorpresa fue mayúscula al llegar y notar que no había nadie adentro, se quedó unos segundos en blanco sin saber que hacer hasta que se le ocurrió ingresar al aula y observar por las ventanas.
-Si es la clase de resistencia física tal vez…
Sus sospechas fueron comprobadas cuando en el exterior pudo ver un grupo de alumnos reunidos mientras uno de ellos de cabello rubio atacaba al profesor directamente a su rostro y estómago, contuvo el aliento pero se tranquilizó al ver que nada había sucedido. Enseguida comenzó a correr por los pasillos y rápidamente pudo llegar a donde el grupo estaba. Se colocó al final de todo y entre medio de los demás alumnos pudo observar como un alumno se acercaba al profesor, este parecía tener el poder de manejar el fuego.
“No me siento capaz de atacar, aunque por lo que averigüé el profesor Lion posee inmunidad… aún así tengo que hacerlo… tal vez… de todas formas aquí no hay nada que pueda usar.”

Daigo llegó apresuradamente al lugar donde se daba la clase de resistencia física.
Le sorprendió sobremanera ver a una fila de alumnos esperar para golpear al docente.
"Tal vez vine al lugar equivocado...qué se gana con golpear a alguien innecesariamente..."
Pensando esto, se acercó al grupo y se sentó en la hierba.
"Bueno, al menos es una buena forma de pasar el rato...una buena solución puesto que no tendré que ir al cine para ver esa película de artes marciales..."
Luego de eso, sacó un paquete de snacks y se puso a comer mientras veía a la clase.

Luego de la clase de literatura se dirgió a la siguiente.
El profesor les inicó que había que salir para llevar a cabo la clase.

Umiko se sorprendió un poco al enterarse de lo que iban a llevar a cabo todos. "pero jamás he atacado a alguien..." pensaba la chica de cabello azul.
Muchos se encotraban entusiasmados con aquello, otros no se veían muy convencidos. Se formó a la espera de su turno.
Al estar frente al apuesto docente, que había salido inmune de los ataques anteriormente recibidos, Umiko no sabía que hacer exactamente. El profesor dijo algo que la alientó a intentarlo, luego de eso la chica extendió su brazo izquierdo, levantandolo al frente. Por consiguiente una cantidad de agua, del tamaño de una persona, se levantó del suelo lentamente. ''ahora... ¿que hago?" La chica no sabía que hacer a continuación, así que solo intentó golpear con todas sus fuerzas al docente.....

Observaba con algo de curiosidad como los alumnos hacían fila deseosos de atacar al profesor que permanecía inmóvil con una sonrisa serena, sin duda alguna la voz de la experiencia hablaba en sus gestos a pesar de ser alguien tan joven. Al mirar hacia un costado Alina pudo ver de repente a aquel chico de cabello celeste que había conocido anteriormente sentado en la hierba mientras comía algo que parecía gustarle mucho. Le causó algo de gracia la expresión en la rostro de aquel chico, su postura y su expresión daban la sensación de que se encontraba en el cine viendo una pelicula que era de su sumo agrado.
-"Daigo me cayó bien... ya que estamos en la misma clase...debería..."
Comenzó a caminar lentamente hacia el chico de cabello celeste, ella era de naturaleza tímida aunque hacía ya un tiempo que intentara superarse aunque sea un poco, pero simplemente el hecho de poseer poderes especiales que una persona común no tiene, no le habían ayudado en su propósito. Cuando llegó frente al chico se decidio a decir algo para hacerse notar, no sabía muy bien de que hablar, pero despues de todo él le había caído bien.
-Hola... volvemos a encontrarnos...

Con la parsimonia típica de siempre, Seth alzó una ceja, así como ligeramente su barbilla analizando la acción del maestro. Unos buenos reflejos, sin dudarlo, pero no era suficiente como para ganarse su respeto.
Pasó sus ojos al resto de compañeros. Habían unos -seguramente los mas débiles- comiendo snacks bajo un árbol. Dejó escapar un soplo de aire de sus labios.
"Dios los cría, ellos se juntan" Pensó.
Su mirada acabó en Mark, viendolo con los ojos desorbitados y la boca abierta, lo que le arrancó una sonrisa. "Igualito que una muñeca hinchable, Kruger!" Pensó en sus interiores.
Sacó la mano de su bolsillo y le palmeó la espalda.
-Oe, Mark -Le comentó ladeando un poco la cabeza hacia él, alzándole el pulgar en cuanto este le miró, mostrando su hilera de dientes- Tu no te ralles, y hazlo sin miedo. Es la única forma que sepas tus límites y control.

No sabía si le había animado, pero en fin, no estaba él para esas cosas. Guardó sus manos en los bolsillos mirando a una chica atacar al profesor.
"Creo... Tener una idea de qué hacer..."

Observaba tranquilamente como la fila de alumnos poco ap oco iba avanzando, el profesor mantenía una firme sonrisa que lo hacía verse más inmune a la tristeza que a otra cosa, era curioso verle actúar así ante tantos alumnos y con poderes realmente extraordinarios.

Trás de sí notó un comentario bastante gracioso por parte del "imitador".
- Modo... ¿silencio? -se quedó unos segundos pensaitva y comenzó a reír como hacía mucho- Jajaja, eso si que no me lo esperaba. -Se echó la mano a los ojos, estaban un poco lacrimosos de la risa tan tonta que le había dado, no era frecuente que riera así aunque ese comentario acabó consiguiéndolo.

- No, ese modo no lo tiene, si lo hubiera tenido no creo que ahora estuviera aquí... -miró con una leve sonrisa al chico- Dellaila, si quieres puedo intentar ayudarte a manejarlo aunque sea un poco, incluso te dejaré mis cascos por hoy, pero luego devuélvemelos ¿si?
Estaba más atenta a aquél chico que a cómo iban los alumnos, tanto que ni se dió cuenta de una pequeña chica de cabellos azulados ahora arremetía contra el docente con una gran carga de agua.